Tomás Serrano

Política SONDEO EL ESPAÑOL – SOCIOMÉTRICA

Último sondeo: el PSC de Illa ganará las catalanas pero no podrá gobernar si no pacta con Junts o ERC

El bloque independentista no conseguiría mayoría absoluta: la única opción de gobierno pasa por el PSC, si logra entenderse con ERC o Junts. 

6 mayo, 2024 20:02

Salvo sorpresa mayúscula, el PSC de Salvador Illa se alzará con la victoria en las elecciones del próximo domingo en Cataluña. Un triunfo agridulce, ya que su buen resultado será insuficiente para hacerse con la Generalitat, cuya puerta sólo podrá abrir si antes sella un pacto con Junts o ERC. 

Se trata de la principal conclusión que arroja el último sondeo de SocioMétrica para EL ESPAÑOL, que coloca a los socialistas a la cabeza, con un 28,8% de los sufragios y 41 escaños. Ese resultado supone una amplia ventaja de 8,9 puntos sobre el segundo, que sería Junts, que obtendría un 19,9% de los apoyos y 32 representantes. 

Por detrás se situarían: ERC, con el 16,4% de las papeletas y 26 diputados; el PP, con el 9,9% y 13; Vox, con el 7,6% y 11; Comuns Sumar, con el 5,6% y 6; la CUP, con el 4,1% y 4, y Aliança Catalana: 3,6%, 2 diputados. 

[Illa lograría hoy 42 escaños: tendría mayoría con ERC o Junts sin necesitar a los Comunes]

En total, ocho formaciones políticas tomarán asiento en el próximo Parlamento catalán, que volverá a estar envuelto en la inestabilidad política, el factor que ha marcado la pauta en la extinta legislatura. Con una salvedad: por primera vez desde que se inició el procés, el bloque independentista no será el predominante en la Cámara autonómica.

Este sondeo deja abierta la posibilidad de que sumen mayoría en el marco menos probable: que todas las formaciones secesionistas alcancen la horquilla más alta. Todas, incluyendo a Aliança Catalana, el partido de ultraderecha independentista que lidera Silvia Orriols y con el que Puigdemont ya prometió que no llegaría a ningún tipo de acuerdo.

A pocas horas de que expire el plazo legal para poder publicar sondeos, los catalanes asumen que el 12-M abrirá tres escenarios posibles: el de un trato entre Illa y Puigdemont, poco probable a tenor de las declaraciones de ambos; el tripartito entre Illa, Pere Aragonés y Jessica Albiach, con una suma holgadamente superior a la absoluta; o un bloqueo que aboque a Cataluña a una repetición electoral. 

Cabe destacar que un gobierno entre el PSC, ERC y Comuns tendría una derivada inmediata: que Puigdemont, al quedarse fuera, decida boicotear la legislatura de Pedro Sánchez. Por más que Illa repita que el futuro de Cataluña se decidirá en Cataluña, no hay que descartar que Cataluña acabe convertida en una moneda de cambio entre Sánchez y Puigdemont. 

El efecto de la carta

Con respecto a la última encuesta de SocioMétrica, es reseñable que el efecto que tuvo la carta abierta a la ciudadanía de Sánchez, que benefició únicamente al PSC, no se ha diluido. Es más, en estos días, los socialistas incluso han mejorado unas décimas más su porcentaje de voto, coincidiendo con la irrupción del presidente del Gobierno en escena. 

Sánchez reaparició por sorpresa de su encierro en la Feria de Abril de Barcelona la semama pasada. Allí fue aclamado por la multitud, en la caseta de su formación. Después, protagonizó dos mítines en los que convirtió en eslogan todo el argumentario que desgranó en la misiva con la que comunicó su compás de espera para reflexionar sobre su futuro profesional.

En las generales del pasado 23-J, el buen resultado del PSOE en Cataluña, a costa de sus socios, fue lo que catapultó a Sánchez a su tercer mandato al frente del Gobierno. Ahora, que se presenta como el único líder capaz de frenar a la "derecha" y la "ultraderecha", su candidato en Cataluña logra su mayor auge.  

Si se compara con las últimas autonómicas de 2021, la principal novedad es el crecimiento del PSC: con 5 puntos y 8 escaños más. A contraio sensu, ERC, que antaño empató en representación con los socialistas, sufre un descalabro y retrocede casi tanto como sube el PSC: 4,9 puntos abajo. Esto le acarrearía una pérdida de siete asientos. 

Junts mantiene intacto el resultado que obtuvo en los anteriores comicios. La diferencia ahora es que dentro del bloque independentista, se sitúa por delante de ERC, con 3,5 puntos de diferencia. Si se diera el supuesto de que los partidos secesionistas obtuvieran mayoría absoluta, esta superioridad de Junts sobre ERC permitiría a Puigdemont reivindicar su anhelo de volver a ser presidente.

De este estudio se consolida una la conclusión de que la negociación para la investidura de Pedro Sánchez, sintetizada en la ley de amnistía (que está a punto de finalizar su tramitación en las Cortes), ha terminado beneficiando a Junts. En ese sentido, una promesa de Puigdemont es regresar a Cataluña para el debate de investidura, habida cuenta de que para entonces ya estará aplicada la medida de gracia.  

Otra novedad sería la subida del Partido Popular, que adelantaría a Vox con un fuerte ascenso. En la cita anterior, Alejandro Fernández estuvo muy cerca de quedarse fuera del Parlamento, mientras que el candidato del partido verde, Ignacio Garriga, se estrenó con una notable representación de once diputados. 

Esta vez, todo apunta a que el PP consumará su deseo de situarse a la cabeza del llamado bloque constitucionalista, donde Alberto Núñez Feijóo sitúa fuera a los socialistas por los pactos con los independentistas en Madrid. En este espectro, el partido que desaparece es Ciudadanos: por primera vez desde 2006 se quedaría sin representación. 

Durante toda la campaña electoral, Salvador Illa ha eludido profundizar sobre los pactos. O los ha mencionado de forma ambigua. Si bien no descartó al principio un acuerdo con el partido de Puigdemont para gobernar, en los últimos días ha virado de posición y ha cerrado la puerta a cualquier entendimiento con Junts. 

Este lunes, sí que ha señalado como "fórmula posible" el tripartito con ERC y los comunes. Aunque los republicanos catalanes, de momento, echan balones fuera y evitan anticiparse a ningún escenario. 

La posición de ventaja de Illa se debe, principalmente, a la transferencia de voto que recibe de todos los partidos políticos. Especialmente acusado es el trasvase de votantes procedente de los comunes, de hasta el 12,5%. Pero el candidato del PSC, con una alta fidelidad de voto, también pesca en otras formaciones: Ciudadanos, ERC, PP y Junts. 

La transversalidad del cabeza de cartel de los socialistas se refleja en las preferencias que muestran los electores sobre el próximo presidente catalán. Illa va primero, con un 19,4% de los apoyos; luego Puigdemont, 14,35%, y, con más distancia, Aragónes: 8,5%. 

Ficha Técnica

La encuesta ha sido realizada con 1.200 entrevistas entre el 1 y 5 de mayo de 2024, extraídas mediante cuotas prefijadas y cruzadas de sexo, edad y provincia de residencia, proporcionales a censos INE, con sistema panel-CAWI.

Para el voto, post ponderación por RV en las últimas autonómicas y generales. El estadístico de convergencia para el equilibraje del total autonómico es del 97% (error =3%).

No procede nivel de confianza al tratarse de muestreo no probabilístico. Director del estudio: Gonzalo Adán. SocioMétrica es miembro de Insights + Analytics España.