Pablo Ibar, el único español en el corredor de la muerte de EEUU, está desde este jueves más cerca de demostrar su inocencia y abandonar definitivamente la tensa espera hasta la pena capital.
El Tribunal Supremo de Florida ha anulado la condena de pena de muerte dictada en 2000 contra el español que lleva casi 22 años preso, 15 de ellos en el corredor de la muerte en una cárcel de este estado.
Esta decisión judicial implica la celebración de un nuevo juicio. Ibar fue condenado por el asesinato en 1994 de tres personas: el dueño de un local nocturno y dos modelos. La defensa de este español de 45 años siempre ha defendido la poca fiabilidad de la prueba que consideró determinante para condenarlo: un vídeo de las cámaras de seguridad que recogió el momento del asesinato.
La defensa de Ibar, de 45 años, quien siempre ha mantenido su inocencia, resaltó en su apelación ante el Supremo de Florida la poca fiabilidad de la prueba determinante, un vídeo "sin sonido, borroso, granulado", grabado por las cámaras de seguridad de la casa del dueño del club y el testimonio, en ese sentido, de un experto facial que lo tacha de nada fiable.
En la grabación, en blanco y negro, aparecen dos individuos buscando objetos de valor con el rostro cubierto. La defensa siempre ha mantenido que las imágenes son borrosas y un experto facial tacha de no fiable la prueba. Otro de los argumentos analizados por el Supremo de Florida es que el ADN de Ibar no fue encontrado en la camiseta recuperada" en el lugar del triple crimen.
"Es un momento de mucha emoción que hemos estado esperando desde hace mucho tiempo. Por fin se abre un camino el camino a que Ibar por fin pueda demostrar su inocencia", ha expresado a la agencia Efe Andrés Krakenberger, portavoz de la Asociación contra la Pena de Muerte Pablo Ibar.