Una mujer infectada por el virus del Zika, que contrajo la infección al ser picada por un mosquito en un viaje que hizo a Latinoamérica, ha dado a luz a un bebé con microcefalia y otras malformaciones, han informado este lunes los médicos del Hospital Vall d'Hebrón de Barcelona.

El alumbramiento no ha pillado a nadie por sorpresa, puesto que ya en mayo se anunció que a la afectada -afectada también por dengue- se le había comunicado que su feto padecía microcefalia y se le había ofrecido interrumpir el embarazo, algo legal en España e ilegal en los países más afectados por la pandemia. La mujer rechazó esta posibilidad, por lo que el alumbramiento ha tenido lugar cuando estaba previsto. 

En junio, Sanidad hizo público que una mujer embarazada había solicitado la interrupción voluntaria de su embarazo tras detectarse que el feto presentaba malformaciones cerebrales debidas al virus del Zika, del que la madre se había infectado en el primer trimestre de gestación. 

"Emocionados y contentos"

En rueda de prensa para informar del primer nacimiento de un niñoafectado por microcefalia por virus del Zika en España, la jefa de Obstetricia y Ginecología del Hospital Vall d'Hebron, Elena Carreras, ha revelado que los padres están "muy emocionados y contentos" con el nacimiento de su bebé, que ha nacido en un parto con cesárea y que la madre se encuentra en buen estado.



El parto se ha producido "a término", al final de los nueve meses de gestación "tal y como quería la madre" y los médicos no han querido dar más información sobre el bebé ni siquiera si es niña o niño o el peso al nacer, para respetar la intimidad y confidencialidad de los datos médicos.



El jefe de Neonatología del Hospital Vall d'Hebron, Félix Castillo, ha informado de que el bebé no ha precisado una reanimación específica pese a haber nacido "con un perímetro craneal bajo", es decir, con microcefalia que le causará afectaciones neurológicas, cuyo grado ahora tendrán que determinar los médicos.



"Su estado clínico es correcto, está controlado y monitorizado en el servicio de Neonatología y se han confirmado las exploraciones del embarazo", que ya detectaron la microcefalia, ha explicado Castillo.

Futuro incierto

Como ocurre en la mayoría de los casos de niños nacidos con esta enfermedad, es complicado determinar el futuro del niño "como  de cualquier bebé con una afectación neuronal". Según ha explicado el pediatra, es difícil predecir su calidad de vida "sin saber aún el grado de afectación cerebral que tendrá y las complicaciones que le pueden surgir".



El especialista ha explicado que el perímetro craneal normal oscila entre los 33,5 y 34 centímetros y que el neonato lo tiene "más bajo", sin especificar cuánto. 

Tampoco han precisado los médicos qué otras malformaciones padece el menor, que ahora está siendo sometido a estudios clínicos para averiguarlo. "Las otras malformaciones vendrán de las exploraciones que hagamos", ha subrayado Castillo.



"La microcefalia -ha añadido- es una traducción de un cerebro que no ha crecido, de modo que no funcionará bien y probablemente tendrá una vida muy dependiente de sus cuidadores y de los cuidados de la sanidad pública".



En cualquier caso, ha señalado el neonatólogo, el bebé será atendido por un equipo de médicos multidisciplinar y por sus padres, "que tienen una relación perfecta y lo cuidarán como si fuera una perla".



El director de la Agencia de Salud Pública de Cataluña, Joan Guix, ha indicado que "es una situación delicada, que exige niveles de intimidad para la familia", por lo que ha dicho que hoy sería la última vez que informarían sobre este primer caso de microcefalia por el Zika en Europa.

El número de casos de zika confirmados en España y notificados a través la Red Nacional de Vigilancia Epidemiológica llega hasta ahora a 190, de los que 26 son mujeres que estaban embarazadas en el momento de la toma de muestras para ser analizadas, según informa el Ministerio de Sanidad. 

De todos los infectados, 189 han sido detectados en personas procedentes o que habían visitado países afectados, en la Región de las Américas, por lo que se trata de casos importados. Además, ha sido notificado un caso autóctono de transmisión por vía sexual en la Comunidad de Madrid.