La Consejería de Educación de la Comunidad Valenciana que dirige el nacionalista Vicent Marzà (Compromís), ha escogido Guardamar para ubicar el nuevo Centro Integrado Público de Formación Profesional (CIPFP) de la comarca de la Vega Baja. Guardamar es el único de los 27 municipios de la zona donde se habla valenciano.
El centro ofrecerá 10 ciclos formativos industriales y de gestión de agua que no se ofertan en el resto de institutos de la comarca. Van desde la Instalación y Mantenimiento a Mecánica, así como estudios, marítimos.
Para Confederación Valenciana de APAs/AMPAs (Covapa), no parece un hecho casual. Entre otras cosas, porque a este centro pionero y germen del futuro modelo de formación profesional, optaban otros tres municipios de mayor envergadura, más estudiantes y más posibilidades de encontrar empleo: Almoradí (corazón industrial), Torrevieja (potencia turística) y Orihuela (capital).
Criterios políticos
"Hemos pedido formalmente explicaciones a la Consejería sobre los motivos de la elección de Guardamar y por qué se han desechado el resto de opciones", explica la presidenta de Covapa, Sonia Terrero, a este diario. Y es que tal y como están cosas, les parece una decisión tomada por criterios políticos en vez de por criterios educativos.
El CIPFP que llevará el nombre de la comarca "La Vega Baja", ofrecerá módulos diseñados en función de la demanda de mano de obra cualificada de la zona, por lo que debe dar servicio a un alumnado que no habla en valenciano.
Esta decisión se adopta en un contexto de enfrentamiento entre los padres de alumnos y la Consejería ante el intento de imponer el valenciano en una zona donde no se hable como lengua vehicular en el 25% (al principio, luego aumentará) de las asignaturas troncales de la educación secundaria y FP.
Reunión telemática
Desde Covapa se ha pedido a Educación que paralice por el momento sus planes de implantar el nuevo sistema lingüístico desde el próximo curso. Argumentan que con la situación de pandemia no se puede gestionar el actual sistema y que mucho menos se podrá en el curso 2021-2022 un cambio estructural del modelo.
Desde la Consejería no les han respondido, así que los institutos tienen que presentar antes del día 28 de este mes su Plan Lingüístico de Centro (PLC) con esa implantación del valenciano para que sea aprobado desde la Generalitat.
También han solicitado el cierre de los centros durante dos semanas hasta que remita esta tercera ola de la pandemia. Usando para ello las dos semanas de vacaciones de Semana Santa. Tampoco les han respondido.
Esta tarde se ha convocado a los padres desde el departamento de Marzà a un "foro telemático" para darles a conocer las decisiones adoptadas. Covapa considera que no es el lugar ni el formato, ya que no les permiten participar, sólo ejercer de oyentes. Creen que se deberían activar las mesas sectoriales que hay previstas para estos casos.