Último fin de semana con el actual régimen de restricciones en la Comunidad Valenciana. Está previsto que el presidente de la Generalitat, Ximo Puig relaje a partir del lunes condiciones como el toque de queda o la hora de cierre de hostelería, pero mientras tanto siguen vigentes las que se aprobaron ya hace dos semanas.
La más llamativa es el mantenimiento del toque de queda, para lo que ha recibido el aval del Tribunal Superior de Justicia (TSJ) de la Comunidad Valenciana. En concreto, la movilidad nocturna no está permitida entre las doce de la noche y las seis de la mañana, salvo causa justificada, como el desplazamiento al lugar de trabajo.
Respecto al uso de la mascarilla, es obligatorio su uso tanto en los accesos como dentro de playas y piscinas, aunque se podrá retirar para bañarse. Otros casos en los que se exime de utilizarla es en la práctica del deporte en el agua o en los periodos de descanso tras el baño, siempre y cuando haya una distancia mínima de 1,5 metros entre personas. Está prohibido fumar en estas zonas.
Tampoco se podrán tener encuentros de más de diez personas en lugares públicos, y del mismo número de personas y dos núcleos de convivencia en el caso de reuniones privadas.
Los horarios de bares, restaurantes y cafeterías estarán limitados hasta las once y media de la noche, con un aforo del 50% en el interior y del 100% en terrazas. Las mesas tienen un aforo máximo de diez personas y es obligatorio el uso de la mascarilla. No está permitido el uso de la barra.
Por su parte, los comercios y grandes superficies podrán tener su horario habitual siempre y cuando no incumpla el toque de queda. El aforo en el interior será del 75%.
Alicante se blinda
Por otra parte, la Policía Nacional y la Policía Local de Alicante han organizado un amplio dispositivo este fin de semana para garantizar el cumplimiento de las medidas sanitarias frente a la Covid-19 con más de mil agentes.
En un comunicado conjunto, ambos cuerpos policiales han informado de que van a realizar un refuerzo en los operativos para vigilar y controlar las zonas de ocio y lugares de mayor afluencia de personas, evitando así aglomeraciones, prevenir los botellones, fiestas ilegales y hacer cumplir los aforos en zonas de ocio y el toque de queda.
Para ambos cuerpos es prioritario que tanto los alicantinos como las personas que visiten la ciudad puedan disfrutar con más seguridad, y por ello pondrán los medios policiales en las zonas de intervención para ser más eficaces.
El operativo incluye drones para vigilar desde el aire las playas, paseos y lugares de mayor afluencia de personas, con el fin de facilitar la disolución de grupos o posibles aglomeraciones que se detecten con estas inspecciones.
Este es el segundo fin de semana sin estado de alarma ni cierre perimetral en Alicante, en el que se prevé la llegada de turistas a la ciudad y residentes de otras comunidades, tal y como sucedió en el pasado fin de semana, donde el comportamiento cívico fue ejemplar y transcurrió sin incidentes, con máximo respeto a las medidas sanitarias.
Esta actuación hará especial hincapié en la zona Centro, el Barrio, Gran Vía, Golf y la playa de San Juan.
La Policía Local mantendrá también binomios de agentes patrullando por las playas con los quads, con un refuerzo de agentes en San Juan, Postiguet y las Calas del Cabo de la Huerta, así como en los paseos, y se realizarán vigilancias itinerantes patrullando por toda la ciudad.