La provincia de Alicante ha experimentado, en los últimos años, un crecimiento exponencial de la llegada de pateras a sus costas. Acentuada desde el año 2016, ni la crisis global de la Covid del último año y medio ha detenido la tendencia al alza que lleva a miles de personas a jugarse la vida en embarcaciones endebles en busca de un destino mejor. 

Solo el pasado fin de semana arribaron a las playas alicantinas 27 personas en tres pateras. En las dos primeras, interceptadas en aguas de Santa Pola a las dos de la mañana del sábado, iban 14 hombres y una mujer. En la tercera, localizada en Benidorm a primera hora de la mañana del domingo, otras 12, todos varones, argelinos y en buen estado de salud, según explica Cruz Roja. 

Esta misma ONG recuerda que la primera patera que fue localizada en la costa de Alicante tuvo lugar en octubre de 2007. Hay que tener en cuenta que para encontrar la primera patera que pisó aguas españolas (Tarifa), hay que remontarse a noviembre de 1988, cuando el país empezó a conocer de cerca el drama de la inmigración. 

El fenómeno, en cifras

Desde la última década, las personas que han llegado en patera a la provincia ascienden a 2.878. En 2011, los datos de Cruz Roja arrojaban un total de 11 personas, todos hombres. En años sucesivos, el crecimiento ha sido desigual: 63 en 2012, 22 en 2013, 94 en 2014 y 26 en 2015. 

Es en 2016 cuando, coincidiendo con la tendencia nacional, Alicante experimenta un aumento notable, pasando a 113 personas, registrándose por primera vez una mujer migrante (desde 2010 que no se había contabilizado). Un año después, a la provincia llegaron más del doble: 377 hombres y cuatro mujeres.  

Después, en 2018 hubo una ligera caída de personas llegadas en pateras: 323 hombres, 10 mujeres, para aumentar al doble en 2019: 612 hombres y cinco mujeres. Fue el 27 de octubre de este año cuando el Puerto de Alicante registró la llegada más masiva en un único día: 92 personas, 20 de ellas menores, en cuatro embarcaciones; en un principio se pensó que eran 93, pero una de las personas rescatadas había fallecido y su cuerpo se encontraba flotando en el agua en avanzado estado de descomposición.

A pesar de estos datos, la cifra se disparó aún más en 2020, año de la pandemia, cuando 913 hombres y 17 mujeres llegaron a Alicante por mar de manera irregular. En lo que llevamos de 2021, y con los datos actualizados hasta este pasado lunes, Cruz Roja lleva contabilizadas la asistencia a 281 hombres y siete mujeres. 

Perfil

El perfil de las personas que van a bordo no ha variado en estos 14 años, explican estas mismas fuentes. En general, abunda el del varón, mayor de edad, en buen estado de salud y de procedencia argelina, aunque también ha habido numerosos casos de marroquíes y de zonas subsaharianas. 

No obstante, con el cierre que se ha dado de otros pasos fronterizos de personas migrantes como Turquía, Grecia, los Balcanes o Italia, a Cruz Roja les ha llamado la atención la recepción de personas procedentes de Siria, Palestina o Eritrea. 

Comportamiento

La llegada de pateras a Alicante no varía según la época del año, y es independiente al frío o a las condiciones de la mar. Así, en el primer trimestre de 2019, no hubo ni una sola llegada de personas, pero de octubre a diciembre fueron 385 (80 menores). Aunque, en líneas generales, a mejor tiempo, más pateras: de julio a septiembre de 2019: 272 (51 menores) y en ese periodo de 20: 354 (33 menores).

El modus operandi no ha variado en todo este tiempo. De hecho, la subdelegación del Gobierno de 2007 en Alicante ya apuntaba la posibilidad de que una nave nodriza hiciera desembarcar las primeras pateras, como finalmente confirmó la Guardia Civil tras una investigación y como el instituto armado insiste preguntados recientemente. 

Lejos del foco

A pesar de estos datos, Alicante está lejos de ser el punto caliente que lleva décadas instalado en Andalucía o Canarias. En 2020, llegaron a España por vía marítima 40.106 inmigrantes, de las que 23.023 tuvieron como destino Canarias; esto representa un 53,6% más que en 2019, cuando arribaron 26.103.

En ese 2019, frente a las 617 personas que llegaron a Alicante, 6.462 lo hicieron a Almería, 3.885 a Granada o 1.485 a Murcia. Así pues, Alicante está más cerca de las islas Baleares, donde se registraron 357 personas, que el resto de la península.