Más "orgullosos" del esfuerzo realizado durante la pandemia de Covid-19 que en el resto de provincias de la Comunidad; más "preocupados" por la situación socioeconómica; y más favorables al "consenso y diálogo político" en una situación de polarización de las opciones electorales. Estas son las claves del Barómetro 2021 en la provincia de Alicante a cargo de la Dirección General de Análisis y Políticas Públicas de la Generalitat que dirige la alicantina Ana Berenguer.
Los resultados de la encuesta entre 1.780 personas de la provincia tienen un margen de error del 2,3%, que aumenta hasta el 7,1% en algunas comarcas como las del interior. Se realizó entre el 11 de junio y el 21 de julio, por lo que el contexto era el de una vacunación en primera dosis muy adelantada y con la reapertura del comercio, hostelería (no del ocio) después de un invierno en el que el Gobierno Botánico decretó medidas muy restrictivas.
Los alicantinos dijeron sentirse "orgullosos" en mayor grado que el resto de los ciudadanos de la Comunidad por "el esfuerzo realizado". Casi un 16% más, entendiendo de la pregunta que puede referirse tanto a la gestión política como a la gestión y el trabajo realizado por los sanitarios.
Con esta pregunta se comprueba cómo en esa fecha el "desánimo" iba cambiando por la esperanza, aun cuando por franja de edad, los menores de 40 años que en ese momento no habían sido vacunados muestran mayor escepticismo.
En este punto la Generalitat incluyó una pregunta sobre el grado de satisfacción con el sistema autonómico (por su relación con la gestión de las vacunas), demostrando que en Alicante es muy alto, como ya señaló la encuesta propia de EL ESPAÑOL hace meses.
La situación económica
Respecto a la situación económica los alicantinos se muestran muy desconfiados, aunque más en el contexto nacional que en el autonómico. El 79,2% cree que la situación económica del país es mala. El 60,8%, en cambio, hace este mismo análisis en relación con la economía de la Comunidad Valenciana. Por comarcas, la más pesimista es la Vega Baja.
Entre las principales preocupaciones de los alicantinos se encuentra el desempleo, la sanidad, el crecimiento económico y la política. Siendo especialmente preocupante la sanidad (casi 10 puntos por encima de la media autonómica) en el área de los Vinalopós y la corrupción política en la Vega Baja.
En la Vega Baja también se dan los peores datos respecto a la "esperanza" en una recuperación económica relativamente rápida.
La situación política
La provincia de Alicante muestra una mayor preocupación por los procesos de polarización política, valorando el escenario autonómico mucho mejor que el nacional.
En este contexto se expone también que la provincia de Alicante es mucho más favorable a la consecución de acuerdos políticos entre diferentes fuerzas que el resto de provincias. Algo lógico si se tiene en cuenta que es la única provincia en la que el color político de su Gobierno (PP-Cs) es diferente al del Consell (PSPV-Compromís-Podemos). Especialmente en la Vega Baja esta reivindicación es mayor (70,2%), casi 10 puntos por encima de la media autonómica.
Además, los alicantinos han expresado mayor preocupación por los problemas de inclusión social que el resto de los ciudadanos de la Comunidad, apelando al mantenimiento del gasto público.
Por último, resulta significativo que en cuanto a los atributos que debe tener un buen gobernante se busca más "autoridad y liderazgo" que en las otras dos provincias de la Comunidad, aunque la "honradez" y la "transparencia" siguen estado por encima de la "gestión" y la eficacia" entre lo más valorado por los alicantinos.