La Diputación de Alicante ha activado una campaña para lanzar cerca de 200.000 bonos consumo dirigidos a los ayuntamientos de la provincia con una inversión inicial que ronda los 9 millones de euros. Se trata de una de las líneas creadas para paliar las consecuencias de la crisis económica. 

Así lo ha anunciado esta mañana el diputado de Presidencia y Economía, Eduardo Dolón, quien ha asegurado que este paquete de ayudas "es la mayor propuesta de incentivos a los sectores productivos de la provincia creada en la historia de la institución". 

La Comisión de Desarrollo Económico y Sectores Productivos ha aprobado esta semana la convocatoria y bases reguladoras para la concesión de estas subvenciones que llegarán a los 141 municipios de la provincia, siguiendo un criterio poblacional y con un periodo que abarcará hasta el 31 de octubre de este año. 

Dolón ha explicado que la Diputación ha recogido la propuesta que meses atrás le trasladó Facpyme (Federación Alicantina de Comercio y Pymes), en distintas reuniones de trabajo para impulsar una estrategia que incentivara el consumo. 

"Se trata de una inversión directa, un incentivo al consumo de cerca de 9 millones de euros que el presidente Carlos Mazón pone en marcha para ayudar a quien más lo necesita", ha concretado el diputado, quien ha añadido que no es suficiente con bajar los impuestos "como ha hecho Mazón, sino que también es necesario incentivar a los consumidores".

El responsable del área de Presidencia y Economía ha avanzado que, a través de esta acción, que llegará a todos las poblaciones y entidades locales menores de la provincia, “se obtendrá el 50 por ciento de descuento en todos y cada uno de los consumos que los consistorios pongan en marcha". "Sin duda alguna, es una iniciativa muy positiva para reactivar y potenciar la economía de la provincia”, ha sentenciado Dolón. 

Por su parte, el presidente de Facpyme, Carlos Baño, ha agradecido a la Diputación de Alicante el hecho de “haber oído al sector del comercio y de la hostelería, entre otros, ya que con estos nueve millones de euros ayudaremos a muchos autónomos y a muchas pequeñas y medianas empresas a reactivar sus negocios y a potenciar la economía de la provincia en un momento tan crítico como el que estamos viviendo”.

A mediados del pasado mes de marzo, con la única abstención de Compromís, el pleno de la Diputación de Alicante aprobó una inversión de 44 millones de euros con los remanentes de tesorería para hacer frente a las consecuencias sociales y económicas de la pandemia. Ahí, ya se fijaron partidas para autónomos y pymes.

Entonces, la Junta de Portavoces acordó, y así se ha incorporado al punto a través de una enmienda, eliminar el porcentaje de pérdidas en la facturación, fijado en un 40% hasta ahora, para poder optar a esta subvención.