Sábado 18 de junio. Compromís tiene previsto celebrar un gran acto en Valencia bajo el pretexto de la celebración del tercer aniversario del Gobierno Botánico, que comparten con PSPV y Unidas Podemos. Pero en la mente de todos los militantes está muy presente el informe de Fiscalía sobre la supuesta prevaricación de su líder, Mónica Oltra, en el caso de los abusos sexuales de su exmarido a una menor en un centro público.
La actual vicepresidenta del Consell abre un cartel también conformado por Joan Ribó, Joan Baldoví, Águeda Mico y Juan Ponce. Se trata de un acto exclusivo para su militancia y simpatizantes, pese a festejar un pacto con otras formaciones. Muchos en la coalición se preguntan, ¿por qué no están entonces presentes representantes de sus socios de Gobierno?
La razón es obvia. La imagen de Mónica Oltra cae cada día en picado y sus intervenciones en las Cortes Valencianas no llaman a la tranquilidad de los suyos, sino más bien al contrario. Es necesario, explican fuentes de Compromís, escenificar el "cierre de filas" con la líder en lo que entienden es una campaña orquestada por la extrema derecha para derribarla. También de la judicatura, según sus declaraciones.
De hecho, Oltra cometió el error de novato en abril de 2021 de autoinculparse en declaraciones en las Cortes Valencianas para quitar responsabilidad a los funcionarios de su área que podrían testificar contra ella. Y ahora ha cometido el error de novato en política de acusar a los jueces de intereses políticos.
Al mismo tiempo, los nacionalistas quieren darle la oportunidad de expresarse ante los suyos sin las réplicas de la oposición. Con el apoyo de los otros líderes de la formación. Líderes entre los que falta el ya exconseller de Educación, Vicent Marzà, que ha dejado la política institucional para dedicarse de lleno a la orgánica ante el reto electoral de 2023.
¿Hay recambio?
El equilibrio de poderes en el seno de la coalición es muy precario y supone un lastre electoral. Compromís se compone del antiguo Bloc Nacionalista Valencià (hoy denominado Més Compromís), de Iniciativa del Poble Valencià (el partido de Oltra, escisión de Esquerra Unida del Páis Valencià) y de Els Verds Equo.
Si el candidato/a es del Bloc (Més Compromís), el siguiente en la lista es de Iniciativa, y viceversa. Si es mujer, el siguiente hombre. Y así en cada una de las listas atendiendo al peso de cada partido con "mecanismos correctores" por infrarepresentación de los minoritarios.
Así que, si se elimina al segundo nombre del cartel porque ya se ha autoexcluido confirmando que se presentará a la reelección por la ciudad de Valencia, el que parte con más posibilidades de ser elegido como recambio de Oltra es el diputado nacional Joan Baldoví.
Baldoví pertenece al Bloc (Més Compromís), pero es visto con buenos ojos por parte de la militancia de Iniciativa. Desde luego, con mejores ojos que Marzà, que sin embargo concita los apoyos de la rama más dura (más nacionalista) de la coalición, que son precisamente quienes tienen más militantes.
En el trasfondo de estos movimientos también hay intereses contrapuestos ante un futuro pacto electoral con otras formaciones de izquierdas. Mientras el Bloc está más cercano a Más Madrid de Íñigo Errejón (incluso cambiando el nombre), los dirigentes de Iniciativa parecen más proclives a unirse a Yolanda Díaz y Ada Colau en el "proceso de escucha" que ha emprendido la vicepresidenta del Gobierno.
Otra cosa es el interés que tengan Díaz y Colau en unir sus imágenes a las de una Oltra cuya carrera política ya muchos dan por amortizada, en relación a su actuación como consellera del área en una supuesta estrategia de ocultación de los abusos sexuales de su exmarido a una menor tutelada.