La Fiscalía piden seis meses de prisión para un exinspector jefe de la Policía Nacional de Alicante acusado de acosar sexualmente a una agente que estaba a su cargo.
El Ministerio Público sostiene que desde que la víctima se incorporó a la brigada que dirigía el procesado en febrero de 2014, hasta la jubilación de este, en 2017, se dirigía la misma con expresiones como "qué guapa" o "qué ojos" e insistía en invitarla a cenar.
La acusación sostiene que el inspector incluso la cambió de funciones y la puso en el turno de fin de semana "para garantizar su cercanía". El relato de los hechos incluye que en junio de 2016, cuando ella le pidió un cambio de grupo, "él la llevó a su casa e intentó besarla". El juicio se celebra el miércoles.
Otros señalamientos
No es el único juicio relevante que se celebrará esta semana en Alicante. Ese mismo día en la Audiencia Provincial juzgan a una mujer acusada de intentar meter droga en el Centro Penitenciario de Alicante II.
Según el escrito de la Fiscalía, la procesada fue detectada el 20 de octubre de 2020 en un control rutinario realizado en el aparcamiento de la prisión. Después de que la unidad canina marcara a la mujer, comprobaron sus pertenencias y localizaron dentro de un paquete de tabaco diferentes cantidades de droga, hachís y cocaína, que también ocultaba en su ropa interior.
El Ministerio Fiscal solicita para ella una pena de prisión de cuatro años por un delito contra la salud pública.
También van a juicio a dos hombres acusados de estafar a los cuatro socios de una empresa de hostelería de Dénia. La Fiscalía mantiene que uno de los procesados compró la firma en 2013 "por un precio muy bajo a cambio de, en el plazo de un año, liberar a los socios de las obligaciones respecto de las deudas de la sociedad".
Según la acusación pública, en lugar de ello, el encausado le vendió la empresa al otro procesado, de modo que ambos consiguieron quedarse con ella por muy poco precio y sin cumplir la contraprestación a la que se habían comprometido.
El Ministerio Público solicita una pena de tres años y medio de prisión para cada uno de los acusados por un delito de estafa agravada.