La Guardia Civil ha detenido a un ganadero del municipio de Tollos como autor de seis delitos de amenazas, dos de ellos graves, ya que, según afirman las víctimas, empleó para intimidarles, en una de ellas una escopeta, y en la otra una navaja de grandes dimensiones. Las víctimas son vecinos de las localidades alicantinas de Famorca y de Castell de Castells. El Juzgado de Guardia e Instrucción de Denia ha impuesto al autor una orden de alejamiento de sus víctimas, y la prohibición de comunicarse con ellos.

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Las investigaciones se iniciaron en el mes de octubre de 2022, cuando el Equipo Especializado en Robos en el Campo (ROCA) de la Guardia Civil de la Compañía de Calpe, a través de las charlas y reuniones periódicas que mantiene con los ciudadanos de la zona, para la prevención de delitos en las zonas rurales, tuvo conocimiento de que un ganadero, asentado en las inmediaciones, estaba amenazando a los vecinos de varias localidades.

Los agentes se entrevistaron con las víctimas, que no habían acudido a denunciar por temor a las represalias por parte del presunto autor. Tras obtener toda la información y analizarla de forma minuciosa, una vez que lograron averiguar la identidad del presunto responsable, comprobaron que se trataba de un hombre de 47 años, de nacionalidad española, un ganadero de Tollos conocido en los alrededores por su conflictividad.

Según afirman los perjudicados, el origen de las amenazas es a causa de las discrepancias sobre las lindes y las zonas de pastoreo. Dos de las víctimas aseguran que las amenazas se produjeron con armas, exhibidas por el autor en actitud intimidatoria. En una de ellas, empleando una escopeta de caza, y en la otra, una navaja de grandes dimensiones.

En el momento de la detención, el pasado 13 de diciembre, en la localidad de Tollos, los agentes realizaron un registro del vehículo del autor, y de las casetas de ganado. Si bien los agentes no hallaron las armas que pudo usar en alguno de los delitos denunciados, el presunto autor es conocido entre los vecinos de la demarcación por su agresividad y conflictividad. Posee antecedentes por hechos similares y no le constan ni licencia ni permisos de armas.

Se le imputan seis delitos de amenazas, dos de ellos graves. El Juzgado de Denia que entiende de la causa ha decretado su libertad provisional y le ha impuesto una orden de alejamiento respecto a sus víctimas, con prohibición de acercarse y de comunicarse con ellos.