La población de Callosa de Segura, con casi 20.000 habitantes, asiste asombrada al fuego amigo entre candidaturas que va a marcar las elecciones municipales que se celebran este mes de mayo.
Por la derecha, el PP va a tener como principal contrincante a un excompañero y antiguo alcalde, Javier Pérez Trigueros; por la extrema derecha, Vox va a enfrentarse a dos escisiones y por la izquierda, PSOE y la coalición de IU y Podemos van a tener que competir con Compromís, una marca inexistente en esta localidad de la Vega Baja hasta hace una semana que se ha llenado de "paracaidistas" que no son del municipio.
Esa es la denuncia que ha hecho recientemente en sus redes sociales Pascual Mollà, uno de los pesos pesados de Iniciativa, una de las ramas de Compromís. Muy crítico con la dirección de su partido después de que su hija, Mireia Mollà, fuera defenestrada como consellera, Mollà padre tachaba de candidaturas "fantasma" las presentadas en esta localidad y en Pilar de la Horadad, al aclarar que están "formadas por gente de otros municipios". "Es un gesto de hostilidad a su población progresista gratuito e inaceptable", por lo que demandaba una "necesaria rectificación".
"Es una lista de paracaidistas, no hay nadie del municipio, ni entre ellos existe arraigo", confirman al respecto fuentes de Izquierda Unida consultadas por este medio. Por otro lado, a fuentes cercanas a Compromís les llama la atención que sea ahora Pascual el que critica las listas fantasmas cuando fue "él mismo el que presentó hace años varias listas en la Vega Baja".
Más allá de la cuestión Compromís, una marca que cotiza a la baja en el sur de la Comunidad Valenciana (en Callosa de Segura solo logró el 3% de los votos en las autonómicas de 2019), las otras izquierdas andan expectantes ante el "barro" que le espera a las derechas. Porque la alcaldía podría decantarse de un lado o de otro por escasos votos, afirman.
El actual alcalde, Manuel Martínez Sirvent, del PP, va a tener que rivalizar no solo con el PSOE como principal partido de la oposición, a cuyo frente repite el exalcalde socialista Francisco Maciá, sino y sobre todo con la Unión de Ciudadanos Independientes (UCIN), a cuyo frente está el que fuera alcalde popular entre 2003 y 2015, Francisco Javier Pérez Trigueros. Este empresario de la construcción fue expulsado del partido conservador en 2020 tras confirmarse su condena por el delito de negociaciones prohibidas a funcionarios públicos durante su mandato.
Después, a principios de este año, y tras cumplir la condena de tres años de inhabilitación al cargo para un cargo público, fue designado asesor del PP en la Diputación de Alicante, cargo que ha ostentado hasta su expulsión reciente al conocerse que concurría por UCIN a las municipales.
Escisiones en Vox
Por si fueran pocas estas novedades, Vox tendrá que competir con dos escisiones. La formación ultra, que ha hecho de Callosa de Segura uno de sus fuertes en la provincia (en las últimas generales fue el partido más votado, por encima del PP, con casi el 30% de los votos), cuenta con dos 'copias'.
Por un lado, España Viva (liderada por Raúl Serna Norte, el que fuera el coordinador de Vox en la comarca de la Vega Baja hasta su dimisión hace unos meses) y que también presentarán candidatura en Torrevieja y El Campello; por otro, el Partido Demócrata Social Jubilados Europeos, cuyo cabeza de cartel Maria Asunción Gambín Martinez, estuvo en el entorno de Vox y fue responsable de España Suma, formación que recogió a algunos de los descontentos con el partido de Santiago Abascal.