Un amplio dispositivo de la Policía Nacional ha evitado que un hombre se causara lesiones de gravedad con un cuchillo en Alicante. Los hechos ocurrieron el pasado martes sobre las 19 horas, cuando varias llamadas alertaron a la Sala CIMACC del 091 comunicando que en un balcón de la calle José María Py de Alicante un varón se encontraba autolesionándose con un cuchillo de grandes dimensiones, realizándose cortes en los brazos al tiempo que amenazaba con acabar son su vida.
Inmediatamente, varias dotaciones de la Policía Nacional se desplazaron al lugar y pudieron comprobar cómo el varón no cesaba en su actitud y no hacía caso a las indicaciones de los agentes. Por todo ello, se activó el protocolo ante incidentes críticos, desplazándose hasta el lugar un subgrupo de la Unidad de Prevención y Reacción así como el Negociador de la provincia de Alicante.
Una agente de Policía Nacional que había acudido al suceso en primer lugar había conseguido establecer comunicación con el afectado, por lo que con el apoyo del Negociador continuaron intentando calmar y tranquilizar a dicha persona, que se encontraba encerrada en el interior del domicilio no permitiendo la entrada a los agentes de la Policía Nacional que pretendían auxiliarlo.
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Sin embargo, y a pesar de los esfuerzos de los policías nacionales, este joven no depuso su actitud y su estado de nerviosismo no hizo sino aumentar, realizándose cortes en ambas extremidades superiores amenazando con cortarse en el cuello con un cuchillo tipo "jamonero" de grandes dimensiones y con bajar a la calle y acabar con la vida de todo el que se encontrara en su camino.
Mientras tanto, se solicitó apoyo de los Bomberos del Ayuntamiento de Alicante los cuales acudieron al lugar aportando medios para poder acceder al edificio desde el exterior.
Dado la extrema gravedad de la situación y con el fin de salvaguardar la integridad física de la persona, se decidió intervenir, se localizó una copia de las llaves de la vivienda y se planificó el asalto en varios pasos consiguiendo distraer la atención del varón por parte del Negociador mientras un equipo formado por agentes de la UPR y del GAC accedió al domicilio consiguiendo auxiliar al joven evitando que se causara más lesiones o que agrediera a alguno de los agentes.
En la intervención se hizo uso de un inmovilizador eléctrico, esto es, una pistola taser, por parte de los agentes de la Policía Nacional dotados del mismo.
"De esta manera, se consiguió salvaguardar la integridad física de esta persona", continúa la nota de prensa, el cual fue atendido por una unidad sanitaria desplaza al lugar que le trasladó a la Unidad de Psiquiatría del Hospital Universitario de San Juan, encontrándose fuera de peligro y sin riesgo vital. Ninguno de los agentes que participó en el dispositivo resultó herido.
Finalmente, el varón de nacionalidad rumana y 37 años de edad fue arrestado por un presunto delito de Desobediencia, Resistencia y Amenazas graves.