La Guardia Civil de Alicante, dentro de la Operación Verano 2023 y en el marco del Plan Turismo Seguro ante el aumento considerable de turistas en la provincia, ha detenido durante los pasados meses de junio y julio a cuatro personas sobre las que pesaban Ordenes Europeas de Detención o extradición de diferentes países europeos.
Se tratan de unas actuaciones que el instituto armado ha realizado con la colaboración de agentes de la Gendarmería francesa, desplazados hasta esta localidad de la comarca de la Vega Baja para trabajar conjuntamente durante el periodo estival.
Gracias a los mencionados dispositivos, entre los meses de junio y julio, se han localizado y detenido a 4 individuos sobre los que pesaban diversas Ordenes Europeas de Detención y Entrega (OEDEs) o extradición.
El primero de los detenidos, un hombre de 25 años, que se encontraba reclamado por autoridades judiciales de Alemania por un delito de homicidio imprudente, fue detenido junto con su hermano, siéndole imputado a este último un delito de usurpación de estado civil.
El segundo, otro hombre de 25 años de edad, fue detenido por una requisitoria por la comisión de un homicidio en grado de tentativa y por otro de tráfico de drogas en Alemania. En este caso, tenía pendiente una condena de 15 años de prisión con las autoridades germanas.
Según avanzaban los dispositivos de seguridad, concretamente los días 12 y 13 de julio, se procedió a la detención de dos nuevos individuos de 40 y 47 años de edad. Esta vez, reclamados por las autoridades judiciales de Rumanía por un delito contrabando y otro de blanqueo de capitales, respectivamente.
Todos los detenidos junto con las diligencias, fueron puestos a disposición de los Juzgados Centrales de Instrucción de la Audiencia Nacional de Madrid, al tratarse del órgano judicial competente.
Otra actuación
La colaboración entre la Guardia Civil y la Policía francesa no es nueva. A finales del pasado mes de junio, ambos cuerpos detuvieron a seis personas por el presunto tráfico ilegal de especies CITES, entre España y Francia.
A los detenidos se les imputan los delitos de tráfico de especies, falsedad documental, contrabando, pertenencia a grupo criminal y tenencia ilícita de armas.
Las investigaciones comenzaron al detectarse que, a través de una conocida red social, se ofertaba la venta de animales de diferentes especies, entre ellos, un zorro plateado, mofetas, serpientes y suricatos, sin poseer para ello habilitación profesional ni la preceptiva documentación que autorizara la tenencia y venta de este tipo de animales.
Estos animales se ofertaban bajo una falsa apariencia de legalidad y estaban ubicados en una finca en la localidad de Sax (Alicante). Una vez se practicó la entrada y registro en dicha finca, se comprobó la existencia de diversos alojamientos acondicionados para albergar especímenes de fauna silvestre.
Investigaciones posteriores determinaron que un ciudadano francés se habría desplazado en varias ocasiones hasta Alicante, al objeto de adquirir ejemplares de fauna silvestre, entre los que se encontraría un serval (Leptailurus serval), ofertado posteriormente para su venta por 3.800 euros.