Año 2009. Antena 3 apuesta por 'La vuelta al mundo en directo', un concurso de telerrealidad en el que 15 parejas viajan por diferentes puntos del planeta realizando pruebas. La cadena ficha a Cyril Jaquet y Paola Alberdi, una pareja de guapos, que conquistó desde el inicio a los espectadores, que pronto descubrirían su gran secreto: Cyril había matado a sus padres en Benijófar (Alicante) cuando tenía 15 años.
Antena 3 se vio obligada a echar a los concursantes al enterarse del terrible suceso, pero antes dio la oportunidad a los chicos de despedirse y explicar lo ocurrido. Aunque el joven, de origen suizo, no quiso dar detalles de lo sucedido, argumentando que no daría más que hablar a los medios de comunicación. Pero ¿por qué sale todo esto a relucir en agosto de 2023?
Un usuario de 'X', antiguo Twitter, ha creado un hilo contando la historia del parricida y su paso por el reality show, y la publicación se ha hecho viral con más de 400 K reproducciones del vídeo de presentación. "Corría 2009 y A3 arrancaba un reality en el que 15 parejas competían por 250 k alrededor del globo. El estreno hizo q las centralitas de la productora recibiesen cientos de llamadas pidiendo la cancelación del programa", así empieza 'ElMíticoBarbas' su tuit.
[Investigan si el triple parricida de Elche mató a sus padres y a su hermano por dejarle sin wifi]
El crimen de Benijófar
En otro artículo de El Español, ya hablamos sobre el parricidio de Benijófar en 1994. El pueblo al que llegaron Oliver Jaquet e Isabel Merino en el año 1984 cuando su hijo Cyril apenas tenía cinco años. El padre era fontanero y la madre traductora de francés, pero vivían bastante bien. Un dato muy importante es que el padre tenía una gigantesca colección de armas en casa, algunas de ellas ilegales.
Según describían los medios de la época, Cyril era un chico al que le encantaba el deporte, y a quién sus padres concedían todos sus deseos. Sin embargo, para él no era suficiente, ya que cada vez pedía más y más.
El doble crimen se produjo el 1 de agosto de 1994. Según la sentencia del caso, lo que empezó en una discusión familiar desembocó en un sangriento tiroteo. Cyril se había enfrentado esa mañana a sus progenitores. Una vez ya detenido, el joven les dijo a los investigadores que lo había hecho porque en casa: "Me reñían y me pegaban".
Aquel día de verano, esperó con una Mauser-Werker 7,65 en mano a que sus padres regresaran. Al mediodía, su madre llegó y sin darle tiempo a reaccionar, el hijo le disparó tres veces, alcanzándola mortalmente en el cuello y la cabeza. Ella falleció instantáneamente, cayendo por las escaleras.
Cuatro horas más tarde, su padre llegó a casa. Cyril lo aguardó en la cocina y descargó las siete balas del cargador sobre él, añadiendo un disparo fatal en la cabeza. El padre cayó al suelo sin vida.
Luego, Cyril se aseguró de tramar un escenario que ocultara su culpabilidad. Simuló un robo, sustrayendo algunas joyas pertenecientes a su madre. Y se marchó en bici a casa de sus abuelos a pasar la noche como si nada. Al día siguiente, cuando el joven volvió a su casa fingió encontrarse los cadáveres y dijo a todo el mundo que alguien había entrado a robar en su casa y había matado a sus padres.
La teoría del robo rápidamente perdió validez, ya que resultaba inverosímil que un ladrón hubiera esperado cuatro horas para robar unas joyas de poco valor. No había signos de cerraduras forzadas ni perros que hubieran alertado ante intrusos. Cuando llegó el momento del funeral, los investigadores ya tenían sospechas de que el asesino probablemente era algún familiar.
Diez días después del crimen, los agentes lo interrogaron. Ante su abuelo, Cyril finalmente admitió la verdad con un simple gesto: "Fui yo".
Alicante, tierra de parricidios
Desde 1994 a 2023 han pasado la friolera de 29 años. Sin embargo, este no ha sido el último parricidio que ha dejado conmocionada a la provincia de Alicante en las últimas décadas porque en febrero de 2022, un adolescente de 15 años, cometió un triple asesinato en la pedanía de La Algoda (Elche): mató a su madre, padre y hermano, de 10 años.
Un caso que guarda muchas similitudes con el de Cyril Jaquet. En primer lugar, porque los dos tenían la misma edad cuando se cometieron los hechos; en segundo lugar, porque ambos esperaron durante horas a que llegara el segundo progenitor para matarlo. Y por último, porque los dos hicieron como que no pasaba nada durante horas para 'disimular'. El parricida de Elche llegó incluso a convivir 3 días con los cadáveres, y a hacerse pasar por su padre para hablar con su jefe y decirle que al día siguiente no iría a trabajar porque había pillado el Covid.
Cyril justificó sus hechos diciendo que sus padres lo maltrataban. ¿El motivo en el caso de Santi?, su madre le había dejado sin internet ni móvil por su bajo rendimiento académico.