El equipo municipal de Gobierno de Alicante que preside el popular Luis Barcala quiere aprobar la creación de 10 direcciones generales y 2 coordinaciones generales para modernizar la gestión de inversiones y servicios. La ciudad que el año pasado entró en el Top 10 de los municipios de España por población inicia así un proyecto que ciudades que similares características llevan implantando desde hace años.
Se trata de una facultad que tienen las denominadas "grandes ciudades", con a partir de una población de 100.000 personas (Alicante tiene ya cerca de 350.000) que data de la ley 57 de 2003, de Medidas para la Modernización del Gobierno Local. En su artículo 123c se atribuye al pleno la facultad de su creación.
En este sentido, su creación no requiere de que se cubran todos los puestos ni de que se alcancen los 82.000 euros de sueldo que se han fijado, sino que faculta al Ayuntamiento la posibilidad de que los consistorios puedan estructurar su organización para "fichar" a profesionales de probada valía para cuestiones generales o para un proyecto concreto de interés general.
El gasto total en estas direcciones generales se ha presupuestado en Alicante cerca de un millón de euros -el presupuesto municipal supera los 310 millones-, con un máximo de sueldo de 82.000 euros los coordinadores y de 75.000 los directores. Aunque en el decreto aparece otro medio millón para cuatro puestos en el área económica del Ayuntamiento requeridos en el área financiera por Secretaría e Intervención que debían haber sido cubiertos con anterioridad.
El pasado viernes se desconvocó el pleno extraordinario que debía refrendar el decreto firmado por Barcala para modernizar las áreas de Servicios Centrales, la Innovación y Sociedad Digital, los Servicios Públicos, el Plan General de Ordenación Urbana, los Proyectos y Obras, los de Empleo, Fomento Empresarial y Nueva Economía, la Cultura y Deporte, el Turismo y Playas, Comercio, Mercados y Fiestas, el Medioambiente y las de Bienestar Social, Educación, sanidad y Familia.
Vox, quien al menos debe abstenerse para que la iniciativa siga adelante, anunció el viernes que "teníamos ciertas dudas al respecto y no nos han convencido determinados aspectos por lo que en este momento no podíamos apoyar la propuesta de reorganización municipal". Por lo que los de Abascal pedían más tiempo.
Por su parte, la izquierda se ha mostrado contraria esta modernización del Ayuntamiento poniendo como pretexto que no se ha resuelto todavía el problema de la Carrera Profesional de los funcionarios municipales. Un asunto que se está negociando paralelamente por Barcala con los sindicatos como anunció en su discurso de investidura.
Las otras ciudades
Málaga, por ejemplo, cuenta con 18 direcciones generales y 2 coordinadores que van desde la Coordinación General Gerente del Ayuntamiento a la Dirección General de Participación Ciudadana, Migración, Acción Exterior, Cooperación al Desarrollo, Transparencia y Buen Gobierno, pasando por Economía y Hacienda, Servicios Operativos, etc.
A eso habría que unirle 11 gerentes de empresas públicas, 6 gerentes de organismos autónomos, 4 gerentes de fundaciones y un gerente de consorcio. Recientemente se dio a conocer que en este mandato se limitarían las direcciones generales y directivos a 25 puestos para los que se ha presupuestado un máximo de 2 millones de euros. El límite en sus sueldos es superior al de Alicante y se fija en 120.000 euros.
También en ayuntamientos antes gobernados por la izquierda se ha usado la figura del director general y coordinador. Así, Valencia cuenta ahora mismo con un coordinador y cuatro directores generales, además de otros 25 altos cargos de organismos autónomos equiparables a estas figuras. Pero es que con Joan Ribó (Compromís) como alcalde hubo hasta 40 cargos directivos con un gasto total de 2,6 millones.
Ayuntamientos mucho más pequeños como Torrevieja (con más de 90.000 empadronados y una población flotante que se duplica en determinadas épocas del año), también han hecho uso de esas figuras profesionales para modernizar su administración local, por ejemplo en área de Urbanismo desde el año 2020. También Córdoba, que nombró ya a cuatro directores generales en las etapas de Gobierno de IU y PSOE.