En Alicante es habitual ver coches de alta gama circulando por sus carreteras sin importar si pasan por la Vega Baja o La Marina Alta. Deportivos, 4x4, berlinas y descapotables de marcas tan reconocidas como caras salpican el paisaje alicantino, sobre todo, en zonas cercanas a la costa. Sin embargo, un porcentaje de ellos son robados, un detalle que pasa desapercibido para todos los que los contemplan, o casi todos.

Las Unidades de Droga y Crimen Organizado (UDYCO) de la Policía Nacional de Alicante cuentan con un grupo especializado en la recuperación de vehículos robados de alta gama, además de otro enfocado en los estupefacientes y una sección dedicada secuestros y extorsiones. El jefe de la Sección UDYCO de la Brigada Provincial de Policía Judicial e inspector jefe, Juan Castillo, indica que está formado por agentes de élite y "es un grupo altamente especializado referente no solo en España, sino en Europa".

Policías de otras partes de Europa han venido a la provincia a conocer las avanzadas técnicas que se emplean para dar con los vehículos ilegales que han sido arrebatados a sus dueños en España para llevarlos a otras zonas o son traídos desde otros países como Alemania o Francia.

"Las características de los policías que lo integran difieren de los demás en la formación que tienen en detección de vehículos sustraídos y falsificación documental. No nos dedicamos a los coches de menor valor, que están más dentro de la delincuencia común. Tratamos de buscar redes de crimen organizado que se dedican a robos y exportación de vehículos, tanto dentro como fuera de la Unión Europea", señala Castillo.

Su foco lo orientan a coches que intentan camuflarse en las ciudades como legales. "Se presupone que los vehículos han sido robados no para un uso esporádico como se podía hacer antes, que se cogía un coche en Alicante para viajar a Murcia y se abandonaba", añade. Para darle ese aspecto de legalidad, les cambian el número de bastidor, el número VIN, que son 17 cifras, y modifican toda la documentación del vehículo.

El alto nivel de vida que hay en Alicante y la gran cantidad de turismo hace que sea una localización perfecta para pasar desapercibido con un Mercedes, Audi, BMW o cualquier otro gran coche sustraído, que pueden llegar a ser de marcas como Ferrari o Lamborghini. Especialmente en Benidorm, Altea y Torrevieja, debido a la alta población y presencia de extranjeros, la actividad es mayor.

Coches robados en una operación en varios puntos de España.

El modus operandi ha evolucionado. Lejos queda ya la imagen de un buscavidas rompiendo la ventanilla o forzando la cerradura y haciendo un puente. Ahora se centran en atacar el cerebro de la máquina, su sistema electrónico. Se puede hacer desde la centralita del vehículo o copiando los códigos de la llave.

El policía resalta que se pueden abrir y arrancar "desde una distancia de hasta 200 metros con un maletín especial". "No tenemos una estadística exacta, pero los más robados son los más vendidos", asegura el responsable del grupo.

Secuestros de coches

Una de las nuevas modalidades delictivas en auge es el secuestro de vehículos a población ucraniana. "Están localizando vehículos, los roban, los esconden en un garaje y hacen vídeos que envían al propietario pidiendo un rescate. No tienen que falsificar nada, simplemente piden dinero para devolver el coche", comenta.

Estos casos son difíciles de investigar porque "utilizan plataformas de mensajería a las que no tenemos acceso y los pagos se realizan en bitcoin, lo que complica el seguimiento", añade. Las víctimas principales en estos delitos son ucranianos refugiados de la guerra con buenos coches, pero los ladrones también son en su mayoría ucranianos, ya que, como dice el agente, "han venido a Alicante tanto buenos como malos".

La unidad también monitorea plataformas de compraventa de coches para detectar vehículos sospechosos. El ojo clínico de estos expertos hace que con solo ver las fotos, el precio y la descripción puedan identificar coches robados y hacer una visita sorpresa al vendedor.

Otros delitos

El experto explica que otra de las grandes modalidades delictivas que investigan es la receptación, que implica "comprar un vehículo robado y favorecerse de un bien que ha sido sustraído a su propietario legítimo".

Además, la unidad también se enfrenta a estafas relacionadas con vehículos, como la venta de coches con fallos ocultos o kilometraje manipulado. Así, una modalidad delictiva en aumento es la apropiación indebida. Según Castillo, "personas o empresas ponen testaferros y alquilan o rentan vehículos, pagan una o dos cuotas y luego dejan de pagar. Esos vehículos ya están en Alemania o en cualquier país de la Unión Europea, los venden o falsifican su número de bastidor y los ponen nuevamente en circulación como vehículos nuevos".

Coches robados.

La unidad también ha observado numerosos casos de falsificación documental. "Estamos hallando muchos vehículos con ITV falsas y carnés de conducir falsos. Muchos son de ciudadanos extranjeros que no han podido convalidar su licencia en España", indica el mando.

El nivel de los agentes de la UDYCO es tan alto que pueden identificar un carnet falso calcado a uno original a simple vista, además de detectar un vehículo robado, incluso si tiene el número de bastidor falsificado.