Cadena humana en playa de Bellreguard en agosto 2023.

Cadena humana en playa de Bellreguard en agosto 2023. Somos Mediterrania

Alicante

Las cadenas humanas para la regeneración de las playas vuelven hoy al litoral de toda la Comunitat Valenciana

Somos Mediterrania convoca estas cadenas a las 12,30 horas para exigir al Ministerio de Transición Ecológica actuaciones consensuadas con los vecinos.

20 julio, 2024 06:20
Alicante

Somos Mediterrania, la asociación surgida en la Comunitat Valenciana a la que se han adherido más 50 colectivos en España, realiza hoy por segundo año consecutivo una acción de protesta por todo el litoral español consistente en cadenas humanas para exigir actuaciones de Ministerio para la Transición Ecológica ante deterioro creciente de los arenales. Será a las 12,30 horas, y en municipios como Dénia hay hasta tres cadenas diferentes convocadas.

Desde las asociaciones proteccionistas de las playas españolas consideran que "el 70% de las playas españolas se están extinguiendo" porque los proceso naturales que nutrían de arenales a la costa " se han ido alterando progresivamente en los últimos 80 años, debido a la construcción de más de 1.200 presas en los ríos y multitud de espigones dentro del mar".

Así, lejos de seguir la estela del Ministerio y la Dirección general de Costas que siempre justifica la pérdida de las playas en la construcción y el cambio climático, desde estas asociaciones aseguran que "las infraestructuras son necesarias para el bien común. Sin embargo, no se ha tenido en cuenta sus impactos y la responsabilidad medioambiental a los que ocasionan el daño, para minimizarlo y repararlo, en aplicación del principio de la Unión Europea sobre el que contamina paga.

En el litoral de Alicante las asociaciones de Guardamar de Segura y Dénia son las que en los últimos tiempos más han denunciado esta situación. Los primeros, en el caso de Babilonia porque el Ministerio quiere acabar con la concesión centenaria de las cosas construidas por el ingeniero Mira para evitar la erosión sin asumir su responsabilidad al construir mal el espigón.

Los segundos, porque Costas les culpa de la erosión de playas como Les Deveses sin asumir la responsabilidad de las infraestructuras permitidas y que evitan el proceso natural de regeneración dunar. De hecho, el Ministerio insiste en aprobar unos deslindes que podrían atentar contra el derecho a la propiedad privada de los vecinos

Los vecinos acusan al Ministerio de intentar "confiscar propiedades" para delimitar un nuevo Dominio Público Marítimo Terrestre en vez de "cumplir el mandato constitucional de protegerlo" porque "en España se ha hecho lo contrario en los 36 años de la Ley de Costas". 

Los argumentos

SomosMediterrania en el comunicado de convocatoria de las protestas "destaca el mensaje y preocupación de la comunidad científica, que lleva años alertando del deterioro al que están sometidos los ecosistemas costeros debido principalmente al apresamiento de sedimentos en los embalses y puertos, y las graves consecuencias que va a suponer añadir a ello, los previsibles efectos del cambia climático. Si no se actúa ya y se frena la desprotección de las playas con soluciones sostenibles, el daño podrá ser irreversible y lo pagarán las futuras generaciones". 

Por esta razón reclaman "una reforma sustancial de la Ley de Costas que no deje en indefensión jurídica a los ciudadanos, y proteja las playas, como ya sugirieron el Parlamento Europeo y el Consejo de Estado. Una Ley que, en 36 años, debería haber servido para proteger nuestras playas, sus arenales, los ecosistemas, las zonas urbanas y los bienes con valor histórico y cultural de nuestros municipios".

Denuncian también que de forma "errónea y arbitraria" la aplicación de esta ley "ha demostrado no ser eficaz, nada ha mejorado, los arenales se hunden y quedan sumergidos en el mar. Cada vez hay menos espacio en las playas para la vida social y el deporte, y los ayuntamientos han visto como han perdido infraestructuras y territorio sus municipios y a miles de ciudadanos les han privado de sus derechos sobre la propiedad o concesiones, generando miles de litigios". 

Por eso exigen al Gobierno central "un diálogo para converger en soluciones integrales e integradoras, adecuadas a cada paisaje, inclusivas con todos; respetando los derechos y territorios, compatibilizando la viabilidad económica y su sostenibilidad con el patrimonio territorial y el medioambiente"