Alicante

Desde las amenazas del Estado Islámico (ISIS por sus siglas en inglés), hasta espionaje de equipos o retransmisión de imágenes sin autorización. Estos eran los principales objetivos del equipo especializado en el sistema antidrones que vigilaba el cielo de París durante los Juegos Olímpicos y del que formaba parte un policía nacional de Alicante.

La magnitud de los Juegos y la complejidad de su organización, con eventos simultáneos en diferentes puntos de la ciudad, hizo que se desplegara un dispositivo de seguridad inmenso con más de 40 países implicados en garantizar el correcto desarrollo del evento deportivo más importante del mundo.

España contribuyó con alrededor de 300 policías y guardias civiles de equipos especializados en explosivos, unidad canina y antidrones. Es en este último en el que el agente Javi de la Policía Nacional de Alicante aportó sus conocimientos para detectar e inhibir cualquier dron no autorizado para surcar el cielo parisino.

La principal amenaza eran los posibles ataques terroristas que se pudieran cometer por parte de lobos solitarios que respondieran a la propaganda del Estado Islámico, que difundió un cartel de un dron con un regalo y la ciudad de París de fondo.

"Los grupos terroristas islámicos utilizaron esto como una manera de publicitarse y motivar a terroristas a atentar en grandes eventos. Pero si no hubiera habido este aviso, nosotros estaríamos igualmente en alerta", señala el agente. Aunque la posibilidad de un ataque era real, el especialista comenta que "no hubo ningún intento registrado".

"Los drones son una herramienta más, como un cuchillo que puedes usar para cortar el pan o para hacer daño. Todo depende del uso que se le dé. Es importante estar actualizado con las tecnologías para poder hacer frente a nuevas amenazas", afirma.

Los equipos de antidrones se colocan en lo alto de edificios para tener mayor rango de detección y de visión. Allí instalan los sistemas de radiofrecuencia, una especie de radar de gran alcance que es capaz de rastrear el cielo para hallar no solo qué tipo de drones son y donde están volando, sino también la ubicación de sus pilotos.

"Los protocolos que tenían establecidos por parte de la policía francesa eran avisar al centro de mando y ellos tomaban la decisión. Si veían que se estaba aproximando a un núcleo cercano, se inhibía directamente", apunta.

La inhibición de estas aeronaves tiene diferentes resultados dependiendo del tipo de aparato y del tipo de frecuencia. El agente explica que "algunos drones tienen preprogramadas ciertas acciones y generalmente vuelven al punto de origen o se quedan parados en el aire. Esto depende del sistema que se esté utilizando y de sus características".

El agente de Policía Nacional (izquierda) en los Juegos de París. Cedida

Si bien su equipo no observó ningún dispositivo peligroso, en otras zonas de París sí que se hallaron aeronaves que afectaron el desarrollo de los Juegos. Uno de los sucesos más llamativos fue el espionaje por parte de la selección canadiense femenina de fútbol a Nueva Zelanda para conocer sus tácticas durante un entrenamiento.

La arriesgada táctica les salió cara, ya que el dron fue localizado, al igual que su piloto, que formaba parte del equipo técnico de la selección americana. Por esta acción antideportiva, Canadá perdió seis puntos en los Juegos Olímpicos, la entrenadora Bev Priestman fue suspendida por un año y la Asociación Canadiense de Fútbol recibió una multa de la FIFA de 226.000 dólares.

Coordinación con la Gendarmería 

La colaboración de la Policía Nacional con la Gendarmería francesa en el área de medios aéreos comenzó con una jornada de formación con los instrumentos y material francés, para, posteriormente, formarles sobre los materiales españoles.

Como parte del dispositivo, el agente pudo comprobar el blindaje que requieren unos Juegos. "Dentro de la unidad de medios aéreos llevo 4 años y he estado en varios eventos importantes, como el volcán de La Palma y la cumbre de la OTAN en Madrid. Sin embargo, la magnitud de los Juegos Olímpicos, con tanta seguridad ciudadana desplegada durante tanto tiempo seguido, fue algo que no había vivido antes", indica el policía.

Y es que más de 50.000 personas formaron un dispositivo de seguridad durante 24 horas con rotaciones para garantizar la seguridad de los parisinos, los espectadores y los deportistas.

Unidad de medios aéreos

Dentro de la unidad de medios aéreos de la Policía Nacional, hay dos áreas principales: el área de medios aéreos y el área de seguridad y protección aérea. La parte de contra drones está bajo el área de seguridad y protección aérea, mientras que en la otra se encuadran, por ejemplo, los helicópteros.

Los drones son una herramienta relativamente nueva, tanto dentro de la Policía Nacional como en la sociedad en general. "Hace cinco años prácticamente no había drones y hoy en día es mucho más común ver a personas comprándolos para fines recreativos o profesionales", señala el agente, quien destaca que tan solo hay un centenar de expertos en esta materia en la Policía Nacional, de los que 11 fueron a vigilar el cielo de París.