En España, la vivienda es un problema evidente. La falta de Viviendas de Protección Oficial (VPO) y el aumento de los precios tanto de alquiler como de venta, en la mayoría de las ciudades de España, lleva a que muchas familias tengan problemas para tener un hogar estable.

Esto a su vez ha hecho que cada vez más propietarios se nieguen a arrendar su vivienda ante el miedo a la okupación, decantándose por otros usos para sacarle rentabilidad, como los apartamentos de uso turístico o directamente la venta, perjudicando de nuevo al mercado del alquiler y a los arrendatarios.

Según adelantaba este medio en otro artículo, la Comunitat Valenciana es la segunda autonomía donde más gente conoce casos de viviendas ocupadas (39%). Una encuesta de la OCU revela que los valencianos son los segundos más preocupados por este fenómeno en España, tan solo detrás de los catalanes.

Empresa desokupa

Teniendo en cuenta esta información, no es de extrañar que cada vez más empresas se dediquen a mediar entre ocupas y propietarios para recuperar la vivienda. Este es el caso de 'Nación 8 desokupa', que trabaja en todo el territorio español, pero principalmente en la Comunitat Valenciana.

Nación 8 desokupa ha resuelto con éxito un total de 102 casos en el último año. Detrás de esta empresa se encuentran Jorge Vilar y Carlos, otro de los directores que no ha querido dar más detalles sobre su identidad. Ambos trabajan con un equipo fijo de 6 personas, que pueden crecer hasta alcanzar los 25 miembros, en los casos más difíciles. A esto se le suman otros tres abogados, que controlan la parte legal.

Zonas más afectadas

Uno de sus fundadores, Jorge Vilar, explica a EL ESPAÑOL de Alicante que alrededor del 45% de los casos que ellos gestionan se producen en la provincia de Alicante, sobre todo en Calpe, La Nucia, Benidorm, Polop.

También en la ciudad de Alicante, concentrando su actividad en los barrios de San Blas, Benalúa, Carolinas y Vistahermosa.

En cuanto a las viviendas, el directivo de la empresa indica que también hay muchos chalés afectados. No se trata solo de viviendas de segunda categoría.

En cuanto al perfil de los okupas, Vilar destaca que lo que menos se encuentran son familias, sino "inquiokupas". Es decir, personas con un contrato de arrendamiento, pero que dejan de pagar. "Algunas veces cuando entramos, nos encontramos con que el principal inquilino no paga y además está subarrendando la vivienda". 

Vilar cuenta que los propietarios de la vivienda suelen ponerse en contacto con esta empresa cuando sus inquilinos deben entre 10 y 12 meses de alquiler. "Algunos consiguen trabajo, pero siguen sin pagar". "Se vuelve cómodo no pagar".

Cuánto se tarda

Jorge Vilar y su equipo suelen saber cuánto tiempo tardarán en echar a los okupas el primer o segundo día de llegar a la casa. Ese es el tiempo de media que tardan en firmar un acuerdo con ellos. Después, Nación 8 Desokupa da un tiempo máximo de entre cinco y siete días para que abandonen la vivienda.

El portavoz de la empresa hace hincapié en que su trabajo nada tiene que ver con la fuerza, sino que "utilizan mucho la cabeza". En la mayoría de los casos colaboran con la Policía y siempre graban todo el procedimiento para demostrar que trabajan dentro de la legalidad y evitar así denuncias de la otra parte.

Caso más llamativo

Preguntamos al portavoz de Nación 8 Desokupa por uno de los casos más llamativos de su trayectoria. "La ayuda muchas veces sale cara", es lo primero que responde. Jorge Vilar recuerda bien el caso de una familia ucraniana con niños menores que acababa de llegar a España.

La propietaria de una vivienda situada en el barrio alicantino de Benalúa les cedió la vivienda durante los tres primeros meses gratis hasta que regularizaran su situación. "Aprovecharon y se quedaron dentro como okupas y nunca le pagaron nada"."Eran bastante conflictivos". "El hombre se hacía sus necesidades dentro del ascensor del edificio", detalla Vilar.

La familia de inquiokupas llegó a firmar un acuerdo para irse, pero al llegar la fecha pactada lo incumplieron. El equipo de Nación 8 Desokupa permaneció en la puerta del edificio para pactar con ellos, que incluso llegaron a interponer una "denuncia falsa" por acoso contra la empresa, tal y como asegura Vilar.

Finalmente, los inquiokupas abandonaron el inmueble "a escondidas", y la empresa mediadora procedió a la toma de posesión de la vivienda tras alertar a las autoridades competentes.