Las esperas y colas matutinas en el TRAM de Alicante se extenderán a las tardes desde esta semana con la ampliación de la huelga de maquinistas, que ahora también afectará a la franja entre las 18:00 y las 21:00 horas, además de la reducción de la frecuencia de 07:00 a 10:00 horas ya activa desde la semana pasada.
Los tranvías funcionarán al 75 % en estos horarios durante todo el mes de febrero debido a las reivindicaciones laborales de sus trabajadores, afectando a todas las líneas menos a la L9 entre Benidorm y Dénia.
De esta forma, la huelga de los maquinistas se mantiene en la L1, que conecta Alicante con Benidorm; L2, que une Luceros con San Vicente del Raspeig; L3, con tranvías entre el centro de la capital alicantina y El Campello; L4, que da servicio a la Playa de San Juan; y L5, entre Puerta del Mar y Plaza La Coruña.
Los sindicatos señalan que están "cansados de esperar" a la Generalitat. Los trabajadores, representados en el comité de empresa por UGT, CC. OO., SEMAF y SF, exigen a FGV y, por tanto, a la Conselleria de Infraestructuras, "que apruebe de forma definitiva las mejoras pactadas por ambas partes el pasado noviembre".
Mejoras exigidas
Con la huelga exigen que se cumpla el acuerdo que FGV firmó el 20 de noviembre, un documento en el que se comprometía a mejorar la oferta comercial del TRAM este 2025. Entre las medidas propuestas se encontraba la duplicación de la frecuencia entre Alicante y El Campello, que pasaría de 30 a 15 minutos; la ampliación de trenes en L2, L3, L4 y L5, o la posibilidad de cambiar la composición de trenes simples a dobles según la demanda de cada línea.
Así, se contemplaba ampliar la plantilla con nueve plazas más de maquinistas para poder implementar las mejoras y reconfigurar los turnos de conducción.
"Este acuerdo, con las nuevas frecuencias del TRAM, tenía que entrar en vigor el pasado 8 de enero, pero no ha sido posible porque la Conselleria de Hacienda todavía no ha dado su aprobación y, al parecer, la coincidencia con las fiestas navideñas no lo ha hecho posible", lamentan los sindicatos. Todo ello cuando recuerdan que "FGV presta un servicio público de transporte todo el año y no cierra por vacaciones".
Por último, denuncian lo que califican como "dejadez" de la Conselleria, a quien le responsabilizan del perjuicio a los miles de usuarios del TRAM, "que ya deberían estar disfrutando de mejores frecuencias de paso".