Alicante

Alicante es una de las grandes ciudades de España con menor presión fiscal local por habitante, con un 28,7% menos que la media de las 27 ciudades más pobladas, según los datos de los presupuestos municipales de ingresos de los ayuntamientos de España de más de 250.000 habitantes, y el Índice de Libertad Económico de las Ciudades Españolas, ILECE 2021. 

En concreto, y según esta información, cada alicantino paga de media 773 euros al año en impuestos municipales, una cifra que supone aproximadamente la mitad de Madrid (1.448 euros) y más de la mitad que Barcelona (1.620 euros), la gran ciudad más cara para vivir. 

En la comparativa destacan también los datos de Valencia, con 1.068 euros, que es ligeramente más costosa que Sevilla, con 1.184, y se sitúa muy cerca de Zaragoza (1.055). Málaga, una ciudad comparable a Alicante por población y modelo productivo, tiene mucha más presión fiscal, con 1.156 euros, mientras que la vecina Murcia se sitúa en 936. 

Las localidades con más de 250.000 habitantes que más se acercan son Vigo, con 868 euros en impuestos al año, y Gijón, con 901.

Por todo esto Alicante fue elegida en 2021 como la gran ciudad española con mayor libertad económica de España, según el ránking elaborado por la Fundación para el Avance de la Libertad, y que analiza la libertad económica de los 50 municipios más poblados de España. 

Alicante allí obtuvo 64,87 puntos, lo que se considera un índice de libertad "moderada", según la fundación. La ciudad fue la segunda ciudad con mayor libertad económica en 2018, y es la primera desde 2019.

Cada vez menos aportaciones

En este sentido, la concejal de Economía y Hacienda del Ayuntamiento de Alicante, Lidia López, explicó en el XXXIV Congreso Nacional de Asesores Fiscales, celebrado Alicante, que "las aportaciones a las corporaciones locales que reciben de entidades gubernamentales disminuyen en cada ejercicio" mientras "los consistorios cada vez cuentan con unos presupuestos más ajustados".

Todo ello "mientras se hace frente a una importante carga de servicios públicos, que en la mayoría de las ocasiones no cuentan con la financiación necesaria”.

Según afirmó, la "continua agrupación de la población en núcleos urbanos hace que las ciudades se enfrenten al continuo reto de ofrecer mayores servicios públicos a los ciudadanos y empresas", con una importante "reducción de ingresos, y déficits presupuestarios estructurales que dificultan la prestación y la calidad de unos adecuados servicios municipales".

Ante esta situación, la regidora aseguró que desde los gobiernos municipales "reclamamos una mayor financiación a las corporaciones locales" y que sea "más justa, ya que nos enfrentamos ante un futuro incierto, con unos recortes presupuestarios cada vez mayores, y las corporaciones locales seguimos buscando fórmulas para equilibrar y optimizar nuestros ingresos con los que poder ofrecer unos servicios públicos adecuados".

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