De forma telemática por el positivo en Covid-19 del alcalde, Luis Barcala (PP), el equipo de Gobierno del Ayuntamiento de Alicante (PP y Cs), han presentado esta mañana los mayores presupuestos de la historia de la ciudad: 313 millones de euros para 2022. También el mayor incremento, un 14,45%, con casi 40 millones de euros más respecto a los 274 de 2021.
Y lo hará sin aumentar los impuestos a los alicantinos ni rebajar el gasto social, que muy al contrario aumenta hasta los 30,7 millones de euros, un 51,4% más que en 2021 con casi 10 millones más respecto al año pasado.
Barcala los ha definido como los presupuestos de la "recuperación, más expansivos y sociales que nunca". Y por eso destacó la continuidad de las inversiones para lo que se solicitará un préstamo bancario de 20 millones de euros. "Solo como instrumento financiero", aclaró el alcalde, "un instrumento necesario para salvar el límite de plazos de ejecución del 31 de diciembre, para dar continuidad a las inversiones que no hayan concluido entonces".
El alcalde pidió generosidad a la oposición para poder aprobar las cuentas ya que "en cualquier negociación nunca se puede llegar al cien por cien de tus pretensiones, tampoco nosotros por parte del equipo de Gobierno". Y recordó que se han asumido muchas de las demandas de otros grupos. "Aquí cada uno que se moje, y que luego lo explique", añadió.
Por su parte, la vicealcaldesa Mari Carmen Sánchez (Cs), señaló que con estas cuentas "tratamos de cerrar el círculo de la pandemia". Y es que si en 2020 hubo de enfrentarse a una coyuntura nueva como la pandemia, y en 2021 comenzó la recuperación, "en 2022 seguimos tratando de poner a Alicante en la vanguardia y cumplir todos los compromisos adquiridos con los alicantinos durante todo este tiempo".
Ese gran incremento de los presupuestos para este año va a parar a las inversiones con 37 millones de euros. Se utilizarán entre otras cosas para el CEIP de Cañada del Fenollar, a la rehabilitación del barrio de San Blas, a la peatonalización del Centro tradicional, Cigarreras o el Pitiu Rochel, entre otras cosas.
También aumenta considerablemente la previsión económica para la creación de empleo, y en especial, de empleo joven. Se dedicarán 2,4 millones de euros, un 17,3% más que el año pasado.
En cuanto al gasto social, Alicante destinará 30,7 millones, un 51,4% más. Se utilizará para la asistencia social primaria, el programa de mayores, la mediación familiar y la inclusión social. Especialmente, el alcalde destacó los 150.000 euros para superar la brecha digital de los mayores.
Además, y ante las nuevas contratas de Limpieza y Recogida de Basuras y la de Transporte Urbano, Alicante aumentará, de aprobarse estos presupuestos, un 12,2% hasta los 45,9 millones la primera; y un 3,69%, hasta los 20,6 millones, la segunda.