La titular del Juzgado de instrucción número 2 de Alicante, en funciones de guardia, ha decretado esa tarde prisión provisional, comunicada y sin fianza para la detenida por matar a la octogenaria encontrada con tres tiros en una vivienda de una partida rural de Elche. 

La arrestada queda ahora investigada por delitos de asesinato, denuncia falsa y daños, sin perjuicio de ulterior calificación. La magistrada se ha inhibido de las diligencias en favor del Juzgado de Instrucción 3 de Elche, órgano que ya tenía abierta una causa por estos hechos.

Por otro lado, la titular de la guardia de Alicante también ha decretado, a instancias de la Fiscalía de Menores, como medida cautelar, el internamiento en un centro, en régimen cerrado, del hijo de la investigada, también detenido tras el suceso.

La sospechosa, que era conocida de la víctima mortal, cuenta con numerosos indicios incriminatorios y hasta ahora se ha acogido a su derecho a no declarar ante la Policía, lo que ha dificultado a los investigadores conocer el móvil del asesinato, según han informado fuentes del caso.

Los hechos ocurrieron el pasado miércoles por la tarde cuando agentes de la Policía Local de Elche llegaron a una vivienda de la urbanización Torre Azul situada en la partida rural de Maitino y encontraron a una anciana, de 81 años, ya "sin vida" y con tres disparos en su cuerpo.

En pocas horas, la Policía Nacional ya tenía a dos sospechosos por el asesinato de esta mujer de nacionalidad británica, que vivía sola. Un fontanero que había quedado esa tarde con la anciana vio, al llegar a las inmediaciones de la zona, a dos personas corriendo con una actitud sospechosa. El hombre, que llamó a la mujer por teléfono sin obtener respuesta, llamó a las autoridades para avisar de que ocurría algo raro. 

Cuando llegaron, la anciana ya había fallecido. Fuentes cercanas a la investigación declararon que los vecinos de la zona habían escuchado detonaciones provenientes del interior de la vivienda. En ese momento, la Policía abrió una investigación para aclarar lo sucedido y detener a los responsables de este crimen. 

Una coartada falsa

Los sospechosos son una mujer, de 46 años, y su hijo, de 16. Las principales vías de investigación señalan a la madre como la cabecilla del tiroteo, mientras que supuestamente el menor le habría ayudado a manipular la escena del crimen eliminando pruebas. 

El coche de la sospechosa ha sido clave en la investigación, después de que apareciera calcinado en una calle de la ciudad de Alicante fruto de un incendio que acabó perjudicando a otros cuatro vehículos. Por otro lado, el arma del crimen también fue encontrada en las inmediaciones de la vivienda de Elche en la que ocurrieron los hechos. La mujer, que practicaba tiro deportivo, denunció la desaparición de su arma al día siguiente del crimen. 

Madre e hijo se habían inventado una coartada que posteriormente los incriminó aún más en los hechos. Todavía se desconoce el motivo del crimen, aunque se sabe que no fue un robo, y que la víctima conocía a los implicados, pues la puerta de su vivienda no había sido forzada. Por su parte, el chico de 16 años está en manos de la Fiscalía de Menores.