La Policía Local de Alicante ha interceptado un nuevo alijo de droga camuflado como equipaje en un autobús que cubría la línea entre Almería y Rumanía. Gracias a la intervención del perro Kata, adiestrado en la detección de estupefacientes, los agentes se incautaron de dos paquetes con 13,6 kilos de cogollos de marihuana en su interior. Esta intervención se ha llevado a cabo dos semanas después de la interceptación en Alicante de otro autobús que cubría la misma línea con 56,2 kilos de hachís y marihuana a bordo.
Esta segunda operación policial se ha llevado a cabo en la mañana del pasado sábado cuando dos agentes realizaban tareas de prevención y mantenimiento de la seguridad ciudadana en las inmediaciones de la estación de autobuses y la avenida de Loring.
Acompañados por el perro Kata, de la unidad canina de la Policía Local, comprobaron que en un autobús de una empresa especializada en transportes a Rumanía estacionado en el andén 11 se estaba cargando diferente paquetería. En ese momento, el can se introdujo en el remolque y señaló dos cajas de cartón que aparentemente contenían un juego infantil y una cafetera doméstica.
[La perra policía Kata ayuda a detener a 3 conductores con 56 kilos de droga a bordo de un autobús]
Los agentes contactaron con el conductor del autobús, de nacionalidad rumana y 56 años de edad, y tras comprobarse que en el interior de los dos paquetes venían camuflados en plásticos 9,5 y 4,1 kilos de cogollos de marihuana, el chófer aseguró que desconocía la propiedad y el destino de las dos cajas de cartón con la droga. También declaró que los paquetes se cargaron en Almería con destino a Rumanía y aportó los albaranes correspondientes de los dos bultos.
Antecedente 14 días atrás
El pasado 15 de octubre, la Policía Local detuvo a los tres conductores de un autobús que cubría la línea Roquetas de Mar (Almería)-Rumanía, en cuyo interior fueron localizadas dos maletas-mochila con 56,2 kilos de hachís y marihuana. Para la detención de estos tres ciudadanos de nacionalidad rumana también fue determinante la intervención del perro Kata, de la unidad canina de la Policía Local, que detectó la presencia de la droga en las dos maletas cuando estaban siendo introducidas en el maletero del vehículo.
En el interior de una de las maletas se encontraron 11 sacos de hachís con un peso de 40,4 kilos y en la segunda otros 11 sacos de marihuana con un peso de 15,8 kilogramos. Preguntados por los agentes, los tres detenidos aseguraron desconocer la procedencia y propiedad de las maletas, aunque uno de ellos portaba una carpeta con los nombres y el teléfono de las personas que iban a recogerlas en Rumanía. Este mismo conductor había asegurado a los agentes que las maletas las había depositado un varón desconocido en el autobús en Roquetas de Mar a las 4.30 de la madrugada.