Un hombre de origen palestino ha sido arrestado en Alicante por extorsionar y amenazar a varias víctimas para que donaran cantidades entre 2.000 y 15.000 euros para apoyar la causa palestina cuando en realidad era para su lucro personal.

Según la descripción de un afectado, se trata de una persona elocuente, convincente en su discurso, que se expresaba muy bien y que daba una imagen de buen musulmán. 

La Policía Nacional explica en un comunicado que su estrategia para conseguir el dinero se centraba en carnicerías "hallal" que proporcionan productos para musulmanes y creyentes que se encontraba en las mezquitas.

El hombre de 49 años fue detenido tras la denuncia de un carnicero, quien hastiado por el constante acoso al que le tenía sometido el arrestado decidió denunciar los hechos. En su denuncia relataba que, un ciudadano de origen palestino había
estado frecuentando su establecimiento haciendo propaganda para ayudar a su pueblo, pidiéndole para la supuesta causa grandes sumas de dinero.

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"Tras varios conatos de conseguir su fin, el acosador, comenzó a verter amenazas contra el empresario, basadas principalmente en arruinar la reputación de su negocio empezando por difamarle con correos que enviaría a sus jefes y proveedores implicándole en delitos que no había cometido", recoge el cuerpo policial.

Una de las características del delincuente es que se excusaba en que tenía impunidad al ser un asilado político. Ante la negativa del comerciante, envió correos falsos para menoscabar la imagen del afectado, quien se decidió a denunciar.

El extorsionador usó la misma táctica con otra carnicería similar. En este caso incluso el arrestado intentó que otro individuo introdujese droga en la carnicería para perjudicarlo, con la fortuna para el afectado de que, esta persona, era amigo suyo y no sólo no atendió tal requerimiento del detenido, sino que le informó de ello.

El individuo también se ponía a la salida de las mezquitas y con el mismo pretexto pedía a los asistentes al rezo dinero para ayudar al pueblo palestino. Muchos de ellos donaban, pero si no lo hacían les amenazaba agresivamente. Además, la Policía descubrió que organizaba supuestas "comidas benéficas".

Durante la investigación se descubrió que conducía un vehículo careciendo de permisos en vigor ni trámites para su expedición, por lo que una vez localizado fue detenido y acusado de los delitos de extorsión, amenazas graves y delito contra la seguridad del tráfico.