Alicante

Son las 15 de la tarde en Alicante y, aunque la temporada alta ya culminó el pasado mes de septiembre, todavía son muchos los turistas que pasean por la Explanada en búsqueda de algún souvenir de la ciudad.

Hace ya 45 años, la identidad de este conocido paseo de azulejos se juntaba con la de 31 casetas instaladas para quedarse y atraer el turismo.

Un turismo del cual depende principalmente su actividad económica y sin el cual no podrían subsistir.

Tras cerca de medio siglo de historia, el rumbo de esas características casetas que forman parte del paisaje urbano de Alicante cambiará drásticamente el próximo 31 de octubre.

¿Cómo cambiará? Desalojando las casetas. Esta es la respuesta que las 60 familias han recibido por parte del Ayuntamiento de Alicante tras años de negociación para una posible reubicación.

Las casetas de los 'hippies', en la actualidad. Laurine Maurice

Así, el equipo de Barcala afirma que el desalojo de los 'hippies' se realizará con el fin de lograr un paseo más amplio, abierto al uso general de la ciudadanía y conectado visualmente con la fachada marítima.

Un argumento que los propios comerciantes califican de "vacío" y "carente de fundamento". "Nosotros somos parte de la cultura alicantina", aseguran.

John Muenala lleva 8 años viviendo de su actividad comercial en su caseta numero 10. 

"Nos echan a la calle, no sé qué voy a hacer". En una conversación con este periódico, el comerciante cuenta cómo tuvo que hipotecar años atrás su casa para comprar su caseta y empezar a desarrollar aquí su actividad económica.

"Cuando compré el puesto, nos aseguraron una ubicación fija aquí en el paseo de la Explanada hasta 2026". Con enfado e impotencia, John confiesa que, a partir del 31 de octubre, no sabe cómo pagará la universidad y el alquiler de los pisos de sus hijos.

"Hasta ahora he podido pagar los estudios de mis hijos gracias a mis ingresos aquí en el paseo, y ahora me quedaré sin nada, lo único que quiero es seguir trabajando", afirma.

Sin reubicación 

Desde la comunicación por parte del Ayuntamiento de desalojar las casetas, se han ido proponiendo varios lugares para su posible reubicación.

Hace dos años, se bajaró la posibilidad de su traslado al paseo Gomiz, una ubicación que ha sido finalmente rechazada tras constatar mediante un estudio in situ que el traslado de las casetas implicaría la reubicación de 28 bancos.

Los propios comerciantes propusieron varios lugares para su reubicación, insistiendo en el requisito de que sea un lugar "muy concurrido", para el correcto desarrollo de su actividad comercial.

La actual presidenta del mercado de artesanía, Lucía Ramello, cuenta cómo han llegado a proponer al Ayuntamiento varios lugares como el Parque de Canalejas, el paseo Federico Soto, el paseo del Doctor Gadea o el parking del Postiguet.

"Nosotros hemos puesto de nuestra parte", señala. En este sentido, enfatiza en las "numerosas" iniciativas que los propios comerciantes han tomado para intentar buscar soluciones.

Entre estas propuestas figura la posible modificación de la estética de las propias casetas, así como la posible subida de la tasa trimensual de 68 euros que pagan los comerciantes al Ayuntamiento por ocupar el suelo.

"No quieren saber nada", con esta sensación en el cuerpo, tanto Lucía como John se muestran "consternados" por la situación.

Una turista, firmando la petición de los comerciantes para evitar el desalojo de las casetas. Laurine Maurice

Ante la "falta de respuesta" por parte del Ayuntamiento, los comerciantes han lanzado una campaña de recogida de firmas para buscar la colaboración ciudadana y solucionar así el problema de la reubicación.

Playa del Cocó

Por su parte, el Ayuntamiento defiende que sigue "buscando alternativas" y permanece "abierto al diálogo" hasta encontrar una solución para los comerciantes.

En este sentido, el equipo de las concejalías de Ocupación de Vía Pública y Comercio se ha reunido el pasado 24 de septiembre con los representantes de la asociación de comerciantes de la Explanada.

Durante la reunión, las dos ediles del equipo de Gobierno han reiterado la propuesta de una nueva ubicación en la zona del paseo de la playa del Cocó, donde tienen cabida los 31 puestos.

Sin embargo, la Playa del Cocó depende de la Dirección General de Costas de la Generalitat, y no del Ayuntamiento.

Así, con el objetivo de buscar una solución, los propios comerciantes contactaron con Costas, asegurando que "no sabían nada" y que "el Ayuntamiento de Alicante no se ha puesto en contacto con ellos".

La zona del Puerto de Alicante también ha sido un lugar propuesto por el Ayuntamiento para una posible reubicación. 

Sin embargo, tras reunirse los comerciantes con las autoridades del Puerto, estos aseguran que "el espacio no podría acoger un mercado diario como el nuestro".

"Nuestro futuro está negro, nosotros creamos empleo y solo queremos que el Ayuntamiento de Alicante nos escuche y nos dejen trabajar", sentencian los comerciantes.