La comisión de Servicios del Ayuntamiento de Alicante ha dado luz verde al nuevo proyecto de ordenanza de Limpieza de los Espacios Públicos y Gestión de Residuos, que será aprobado el próximo 28 de noviembre.
La propuesta refuerza la inspección y el régimen sancionador con nuevos supuestos y multas que van desde los 300 hasta los 3.000 euros para los infractores. Como por ejemplo miccionar o defecar en la vía pública, cuya sanción asciende de los 300 a los 1.500 euros.
La iniciativa ha sido respaldada con el voto mayoritario de PP y Vox, más la abstención del PSOE y con solo tres votos en contra, los dos de Compromís y el de EU Podemos.
El Ayuntamiento ha explicado que la nueva ordenanza actualiza las normas de uso y conservación del espacio público, incorpora nuevas modalidades de recogida selectiva y regula la gestión de residuos especiales, como los de construcción, poda, jardinería y residuos domésticos peligrosos.
También adapta el uso de las instalaciones municipales de tratamiento de residuos a la normativa vigente, en vigor desde noviembre de 2016.
El nuevo proyecto de ordenanza también aborda en materia sancionadora la ordenación de las actividades inspectoras sobre la actividad que incide en la limpieza y los residuos y tipifica nuevas conductas infractoras emergentes en la realidad cotidiana actual.
Todo ello sin perder de vista que la voluntad del Ayuntamiento es hacer cumplir las normas a través de la concienciación e información mediante programas específicos para toda la ciudadanía.
El palabras dle vicealcalde y concejal de Medio Ambiente, Limpieza Viaria y Gestión de Residuos, Manuel Villar: "La nueva normativa aborda todos los aspectos relacionados con la limpieza urbana, la recogida y gestión de los residuos, incluyéndose de forma específica la recogida selectiva, así como la regulación y, por primera vez, la regulación del uso del Centro de Transformación de Residuos y la Red de Ecoparques".
"Además, se refuerzan las facultades de los inspectores tanto en el control de la concesión del servicio como del cumplimiento de la selección de residuos en origen de particulares y en el levantamiento de actas de inspección, además de reforzarse el régimen sancionador para combatir las conductas ilícitas y las infracciones", continúa.
"El horario de depósito de residuos se mantiene entre las 20 y las 24 horas, salvo en el residuo orgánico que requiere el uso de la tarjeta electrónica para la apertura del contenedor" ha señalado Villar.
Régimen sancionador
La modificación de la ordenanza de limpieza de Alicante incluye un régimen sancionador con tres niveles de multas: leves, graves y muy graves, que oscilan entre los 300 y los 3.000 euros, en línea con la normativa nacional y autonómica.
El número de infracciones recogidas en la normativa se ha ampliado, pasando de 63 a 86. Estas incorporan medidas más estrictas en aspectos que preocupan a la ciudadanía, según una encuesta del servicio de limpieza. Entre las conductas sancionadas destacan:
- Depositar papeles, bolsas, colillas o chicles en la vía pública fuera de papeleras o contenedores.
- Sacar residuos fuera del horario establecido o dejar enseres y voluminosos sin avisar al servicio de recogida.
- Micciones o defecaciones en la vía pública, cuya multa ha pasado de 300 a 1.500 euros.
- No recoger excrementos de mascotas, no diluirlos con agua o no llevar bolsas para su recogida, con sanciones de hasta 900 euros.
- Además, no limpiar grafitis en las fachadas se considera una falta grave, con sanciones de hasta 780 euros.
- Las infracciones más graves, como el abandono de residuos de construcción o demolición, se multarán con el máximo permitido: 3.000 euros.
Con esta revisión, el Ayuntamiento refuerza su compromiso por mejorar la limpieza en los espacios públicos y garantizar el civismo.