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La nueva ordenanza contra el ruido en la ciudad de Alicante ya está en marcha y llega con novedades. El Ayuntamiento valora el "amplio respaldo" a la norma y la inclusión de nueve alegaciones de los vecinos y la enmienda de Vox.

La concejala de Urbanismo, Rocío Gómez, ha resaltado a través de un comunicado "el amplio apoyo que han obtenido dos grandes iniciativas que son determinantes para el futuro de nuestra ciudad y para mejorar la calidad de vida de los alicantinos, como son la ordenanza contra el ruido y la moratoria a la concesión de licencias a pisos turísticos".

¿Qué es lo que cambia respecto a lo previsto? La enmienda de Vox que, como detallan es la única presentada por los grupos municipales, se centra en la prohibición de la realización de fiestas, juegos, reparaciones materiales o mecánicas en domicilios que excedan los volúmenes permitidos. 

Con la nueva enmienda se establece la prohibición entre las 22.00 y las 8.00 horas, excepto los viernes, sábados y vísperas de festivos, que se establece entre las 0.30 y las 9.30 horas.

En las excepciones se marca también una serie de días festivos en los que se amplía sustancialmente el margen ya que la prohibición será entre las 1.30 y las 9.30 horas. Eso será para los días 1, 5 y 6 de enero; 20, 21, 22, 23 y 24 de junio; y 24, 25 y 31 de diciembre.

¿Y qué es lo que han logrado cambiar los vecinos? El Ayuntamiento destaca la ocupación con mesas y sillas en espacios privativos y en el dominio público. Ahí dejan que se instalen pantallas sin sonido en el interior del local con destino al exterior, pero limitando su funcionamiento únicamente entre las 08.00 horas y la 00.00 horas.

Las infracciones que detalla la nueva ordenanza se clasifican en leves, graves y muy graves. Las muy graves serán sancionadas con una multa desde 12.001 a 300.000 euros y retirada definitiva de las licencias o autorizaciones correspondientes.

Las graves conllevan multas desde 601 euros hasta 12.000 euros con posibilidad de suspensión de la licencia ambiental por un período de tiempo comprendido entre un mes y un día y un año. En el caso de infracciones leves se recogen multas de hasta 600 euros.

Esta ordenanza supone una revolución en la vida diaria de la ciudad porque suma a los tradicionales controles de ruidos y vibraciones nuevas definiciones de zonas, planes y mapas acústicos, aislamientos, medidas de control y sistemas de alarma, información y transparencia con carácter actualizado y permanente.