La Navidad trae buenas noticias a la ciudad de Alicante: dos agentes de la Policía Nacional han logrado salvar la vida a un bebé de tan solo seis meses de edad, que se encontraba en su domicilio en la zona norte y no podía respirar.
Una angustiosa llamada a la sala 091 el pasado 17 de diciembre activó la urgente operación de salvamento. En ella explicaban que un bebé estaba teniendo severas dificultades para respirar y corría peligro de ahogamiento.
Así lo comprobaron los agentes cuando llegaron al domicilio y se encontraron con que el recién nacido estaba inmóvil, con los labios amoratados, sin mostrar signos de reacción y con dificultades respiratorias.
La rapidez y el conocimiento adecuado eran imprescindibles para conseguir el objetivo. Así que uno de ellos lo agarró y lo volteó en uno de sus antebrazos para aplicarle la conocida maniobra de Heimlich.
Gracias a ella se liberaron sus vías respiratorias de las obstrucciones que le impedían respirar con normalidad y el lactante a los pocos segundos comenzó a llorar y a recuperar su color habitual.
La Policía Nacional destaca la importancia de la coordinación de los agentes y la rápida actuación para salvar la vida del bebé. De hecho, mientras esperaban la llegada de los servicios sanitarios del SAMUR, estuvieron estimulando al bebé para mantenerlo estable.
¿Qué había sucedido? Como detallan los efectivos sanitarios, tras realizar una primera exploración del bebé, este tenía casi 39 grados de fiebre, gases y obstrucción por mucosidad.
Para atenderlo y evitar la vuelta de las complicaciones se le trasladó junto a su madre al Hospital General Doctor Balmis, donde ha permanecido en observación unas horas hasta que los médicos se aseguraron que su vida no corría peligro.
Esta historia con final feliz es posible gracias a la constante formación que realizan los policías, como destacan a través de un comunicado. En ella se imparten cursos de reanimación cardiopulmonar, sobre el uso de desfibriladores, y otras maniobras de primeros auxilios como la mencionada maniobra de Heimlich.
Son varios los casos en la provincia de Alicante en los que la actuación urgente de los agentes de la Policía Nacional ha conseguido salvar vidas mediante este tipo de acciones, como el hombre que se asfixiaba mientras comía un torrezno o la mujer que se desplomó y aplicaron la reanimación cardiopulmonar.
Cómo actuar
¿Y si nos encontramos en una situación similar? La Policía Nacional detalla los pasos que se tienen que dar en caso de un atragantamiento de un bebé menor de 1 año.
La maniobra de Heimlich es un procedimiento rápido de primeros auxilios para tratar la asfixia debido a la obstrucción de las vías aéreas superiores. Para aplicarla hay que colocar al bebé bocabajo sobre su antebrazo, de forma que la cabeza del bebé quede más abajo que su pecho.
Lo siguiente es sostener la cabeza en la palma de su mano, sobre su muslo. No hay que cubrir la boca del bebé ni girar su cuello para asegurar que pueda expulsar lo que sea con facilidad. Utilizando la palma de la otra mano hay que darle hasta cinco palmadas entre los omóplatos.