La joven de 26 años, de nacionalidad ucraniana, que se despeñó en la tarde de este martes por el acantilado del turístico castillo de Benidorm cuando se hacía un 'selfi' se encuentra muy grave, según fuentes consultadas del Hospital General de Alicante, donde fue ingresada tras ser rescatada.
Fuentes sanitarias consultadas por este periódico indican que su estado es crítico y que está siendo atendida por la Unidad de Reanimación, después de que presentara un cuadro de politraumatismos, así como síntomas de ahogamiento.
La chica, que según fuentes consistoriales es turista hospedada en Villajoyosa, se hallaba ayer a las 18.10 horas en compañía de una amiga en el mirador del castillo de Benidorm, que muchos conocen popularmente como el 'balcón de Europa', uno de los puntos más visitados y fotografiados de la capital turística de la Comunitat Valenciana.
Cuando trataba de hacerse una autofoto sobre una barandilla con la playa de Levante de fondo, al parecer se descuidó y se precipitó accidentalmente desde una altura de unos treinta metros -han precisado fuentes municipales- por el acantilado hasta llegar al mar.
Rápidamente, la sala operativa del 112 fue alertada del incidente, a cuyo lugar del impacto se personaron socorristas del puesto de la playa de Levante y una embarcación, donde se le practicaron las primeras maniobras de reanimación tras rescatarla del agua.
Posteriormente, en el puerto de la localidad costera, la unidad del Samu y Soporte Vital Básico que estaba esperando le practicaron las labores de recuperación cardiopulmonar avanzada y otras técnicas de estabilización que permitieron recuperar las constantes vitales, tras lo cual fue dirigida al Hospital General de la provincia.
Sin incidentes similares
El Ayuntamiento de Benidorm no tiene constancia de que hayan ocurrido incidentes similares en este mirador, uno de los lugares que cada año concentra a decenas de miles de turistas ques se apostan para fotografiarse con las vistas que ofrece.
Así, el famoso metodo del selfie está detrás de innumerables incidentes, en muchos casos con resultado de tragedia. Como el caso de Orihuela del verano de 2019, cuando dos jóvenes ingleses que estaban de vacaciones, de 20 y 25 años, decidieron hacerse una foto en el paseo marítimo cuando se precipitaron al vacío desde una altura de 12 metros.
Según un estudio de la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos, en el mundo murieron 259 personas por hacerse selfis, en algunos casos muy arriesgados, entre octubre de 2011 a noviembre de 2018. Este informe situaba a la Indiacomo el país con más muertes relacionadas con selfis, seguido de Rusia, Estados Unidos y Pakistán. El estudio también desvelaba que los hombres son más propensos a fallecer por culpa de los autorretratos: un 72% de las víctimas eran varones.