Seis esculturas monumentales toman el Paseo de Poniente de Benidorm. Encanto, Arrullo, Refugio, Conciencia, Sueño y Crepúsculo son los nombres de las figuras de mármol y bronce que convertirán el emblemático espacio en un museo al aire libre.
Las obras del escultor costarricense Jorge Enrique Jiménez Deredia se engloban en la exposición 'El viaje de la vida'. Y llega a Alicante después de pasar por Florencia, Roma, Ciudad de México, Shangai o Miami. El artista es además el primer escultor latinoamericano que tiene obra en la Basílica de San Pedro en el Vaticano, en el interior de un nicho proyectado por Miguel Ángel Buonarroti entre 1544 y 1564.
Toni Pérez ha trasladado que para Benidorm "es un orgullo poder volver a disfrutar de esta colección en un espacio como este Paseo de Poniente". Asimismo, el primer edil ha recordado que estamos ante "otra exposición maravillosa, cultura en la calle y de altísimo nivel", en lo que ha calificado "de una gran sala de exposiciones desde Benidorm para el mundo".
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"El hecho cultural en la calle, en este caso a través de la escultura monumental, hace que en cualquier momento del día, en una ciudad como ésta donde la vida sucede a pie, te encuentres con una obra de arte de incalculable valor, puedas dialogar con ella y establecer tu conexión", ha declarado Pérez.
Por su parte, Jorge Jiménez Deredia ha manifestado que la posibilidad de exponer su obra en la calle permite que el gran público, "independientemente de su condición económica y social, pueda tener contacto y relación con estas esculturas".
Las esculturas son de color negro o blanco y pesan entre seis y siete toneladas cada una, con la esfericidad como elemento principal porque "está vinculado con la vida, con el ser humano, y con el razonamiento de que nosotros estamos haciendo un viaje, que es el viaje de la vida, desde el significado de la participación cósmica de nuestra propia existencia", ha explicado el artista, quien ha manifestado que "somos un granito de arena en la inmensidad del universo pero el universo necesita de nosotros porque nosotros somos parte de él".
Además, todas las piezas disponen de un código QR que permitirán al espectador realizar un escaneo con su teléfono móvil, que les conducirá a una página donde pueden obtener toda la información de cada una de las esculturas, de la colección y del propio artista.