"Sentir las Hogueras" es el objetivo que se marcan desde el Ayuntamiento de Alicante respecto a las fiestas tradicionales de la ciudad. El cómo ya es una cuestión más abierta. Tanto el alcalde Luis Barcala como el concejal de Fiestas Manuel Jiménez están a la espera de dos decisiones que determinarán el futuro próximo.
La primera está en la reunión entre los representantes del mundo fallero y la Conselleria de Sanidad. El encuentro de este lunes ha determinado que tanto las actividades falleras como cualquier fiesta tradional o popular, podrá celebrarse en la Comunidad Valenciana a partir del 1 de septiembre.
Sobre el tipo de actos que se autorizarán después del verano, la consellera de Sanidad, Ana Barceló, ha puesto como directriz común la necesidad de "evitar las aglomeraciones de todo tipo, tanto del personal de dentro de la fiesta, como de la gente que acude a los actos".
La segunda decisión que esperan se producirá la semana próxima. A principios de esta confían en tener las respuestas de las comisiones de hogueras y barracas al cuestionario de la Federació que se les envía este mismo lunes.
"Adoptar una decisión ahora es prematuro", razona Barcala. "Lo que verdaderamente importa en estos momentos es conocer la opinión del mundo de la Fiesta. Ellos, atendiendo a las directrices que marque la pandemia, son los verdaderos protagonistas".
De hecho, como apunta el concejal de Fiestas, sus representantes han tomado la iniciativa para ver cómo se afronta el panorama actual. "Los compañeros del mundo festero en Fallas, con quienes hemos estado, han trabajado el protocolo de actuación que querían trasladar a la Conselleria para ver la viabilidad cumpliendo las medidas restrictivas".
Jiménez valora ese compromiso que surge del sector: "Que sean las Fallas las que marquen este protocolo no nos parece mal porque alguien tiene que tomar las riendas. Si no lo hacen las autoridades, fueron un grupo de falleros". Por eso reitera que "desde Alicante hay muy buena relación" pero "hay que esperar a ver y ver esas alternativas".
Los diversos escenarios que se plantean en la gestión desde Valencia siguen siendo un territorio abierto hasta que la propia Conselleria de Sanidad los puntualice. En todo caso, afirma Jiménez, "lo fundamental será el nivel de vacunación". Con él, agrega, se podrá elevar o no el porcentaje de asistentes a los diversos actos populares que se organicen.
"Por parte de las Administraciones públicas hay que favorecer a todos los colectivos", indica Jiménez. Por eso cree que en el mundo festero "hay tantas ganas" que "cualquier alternativa que se presentara podría ser bien aceptada". Pero, como matiza, "en Alicante estamos a expensas del cuestionario para ver si quieren celebrar o trasladar a 2022".
Lo que sí habrá en junio seguro es un programa que "pretende impregnar Alicante de ilusión". Un plan que estará atento a las normas que se marquen desde Sanidad para la celebración de actos pero "con distintos toques de Fiesta que nos puedan hacer sentir la llama y la pasión de las Hogueras. Hay que seguir la actividad".