Alicante

La llegada de la primavera tiñe la ciudad de Alicante. Y no de morado por las jacarandas, sino por la ficción criminal. Así arranca la decimosexta edición de Mayo Negro, un encuentro que trae a los creadores más destacados del género. El escritor Mariano Sánchez Soler es uno de los coordinadores de esta cita que reivindica los orígenes del formato: "Se está olvidando la denuncia".

De miércoles a viernes en la Sede de la Universidad de Alicante se traerán a diferentes creadores para analizar el panorama y este año lo harán bajo el lema de La costa del crimen. "Alicante claro que es tierra de crímenes y de refugiados internacionales, es un clásico", opina Sánchez Soler, "el Mediterráneo en general, y este en particular".

La sucesión de temas que van apareciendo en la prensa diaria, y que a lo largo de su extensa trayectoria pudo cubrir de primera mano, demuestran su hipótesis. "Coges un periódico y te lo encuentras en las noticias porque siempre están aquí: mafia, blanqueo de capitales o atracadores. Es un territorio de dinero. Desde Girona hasta Cádiz, está lleno de gente que vive aquí dentro de un movimiento de personas".

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Y con su apuesta por el género negro destaca esa búsqueda del contexto o de las razones que hay en la historia detrás de los crímenes. "La denuncia y cómo explica el mundo es la tercera pata del género porque no es solo la búsqueda del crimen, sino qué hay detrás de todo".

El éxito que disfruta precisamente el sector tanto en libros, series como en pódcast es también el que hace que se mezclen propuestas que antes tenían su nicho particular. De ahí que lamente que la denuncia "se está olvidando porque hay muchas novelas con la etiqueta de novela negra cuando son de intriga, suspense o thriller policial y les falta la visión que tenían Hammett o Chandler", señala haciendo referencia a los clásicos fundacionales del género americano.

Ahí Sánchez Soler puntualiza que no porque haya un crimen ya es novela negra. "Es un problema de etiquetas porque a nivel editorial se impone lo de negra y la ponen a todo tipo de libros: de detectives, de fantasmas, esotéricas… y lo que era una evolución realista del género policíaco se está poniendo bajo ese paraguas muy amplio y cualquier cosa es negra".

La programación

Las propuestas que han elegido para este año muestran lo diferente que puede ser el género, respetando esos planteamientos. Así se verá este miércoles desde la apertura que realiza con el otro coordinador, Francisco Ortiz, y que dedican a Terciopelo azul de David Lynch hasta el encuentro con Isabel Ferrando y Jorge Castro, el mismo día, por su cómic Destrozados.

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El jueves es el turno de Youssef El Maimouni y su Nadie salva a las rosas y Carlos Salem con Tango del torturador arrepentido. Mientras que el viernes se despedirán con Claudio Cerdán y El hombre sin rostro que dará paso a la conferencia de Rafael Maluenda dedicada al cine negro en la costa mediterránea.