En el avance económico de España a finales del siglo XIX, la ciudad de Alicante ocupa un lugar principal. Y una placa de bronce en el Ayuntamiento así lo recuerda. Gracias al establecimiento de la cota cero geodésica.
Esta es la reivindicación que este lunes se ha realizado a escasos metros de ese punto emblemático. Ministerio de Transportes y Ayuntamiento de Alicante se han unido en un acto que recuerda la importancia "histórica" de esta determinación.
¿Y por qué fue tan importante? El subsecretario de Transportes, Rafael Guerra, explica que esta era una premisa imprescindible para poder realizar el primer mapa topográfico de España.
Las diversas administraciones valoran el largo trabajo de cuatro años que permitió determinarlo porque "fue fundamental para el desarrollo de las infraestructuras", como remarca Guerra.
¿Por qué se eligió Alicante? "Se eligió por el clima y porque el puerto estaba lo suficientemente resguardado, lo que permitía una toma de datos fiable", señala el subsecretario.
Un factor fundamental es que de toda la península Ibérica, la ciudad tenía el sistema menos discontinuo de la pleamar y bajamar, con solo 20 centímetros, mientras que en Murcia y Valencia puede ser de 50 o 70 cm.
Durante cuatro años un ingeniero, desde 1870 hasta 1874 tomó cuatro medidas diarias de la altura en el puerto de Levante y por eso el Ministerio colocó una placa conmemorativa en 2005.
Al determinar esa cota cero se decidió luego trasladarlo a las escaleras del Ayuntamiento de Alicante, donde luce una placa y clavo de bronce. Y desde ahí el Instituto Geográfico Nacional marcó el reparto de placas por toda España: de Cádiz a Barcelona.
El momento de Alicante
El Instituto Geográfico Nacional después fue añadiendo más instrumentos para medir como sistemas GPS, "pero esto nos lleva a apreciar la magnitud del trabajo de los ingenieros regionales".
Luis Rodríguez, presidente de la Autoridad Portuaria, recuerda que en esa época se vivía un momento próspero en Alicante porque derriba sus murallas y acababa de recibir el ferrocarril en 1858, la primera línea de larga distancia en toda España.
Y esa conexión por ferrocarril es ejemplo de la importancia industrial que tenía la costa sur de la Comunitat Valenciana ya que las otras dos líneas inauguradas antes eran Madrid-Aranjuez y Barcelona-Mataró. Con ella, además, se facilitaba el trabajo de los técnicos que acudían a hacer estas mediciones.
¿Quiénes eran esos técnicos?
El alcalde Luis Barcala destaca esa labor hasta ahora anónima: "Un trabajo tan callado que no sabemos quiénes son". Por ello anuncia que han pedido al Instituto Geográfico Nacional los datos de los documentos de la época para poder dar el reconocimiento que se merecen a aquellos trabajadores.
Y el presidente de la autoridad portuaria destaca que el mareógrafo de 1925 en la escollera de Levante, es el más antiguo y el que se conserva más tiempo en activo de España. Eso permite tener la serie histórica más larga y de forma ininterrumpida. Datos que se suman a las técnicas satelitales. Y esto lo tenemos que incorporar a visitas turísticas y escolares.