El ambiente de los grandes estrenos vuelve a Alicante con la reapertura de los estudios Ciudad de la Luz. La ley del mar se convierte en la primera serie en pasar por la ciudad para presentar el resultado de su intenso rodaje en Santa Pola. Y la alegría convive con el duro mensaje de esta coproducción que revive el drama de las pateras de mano de su propia protagonista: "¿Qué vas a dejarlas, que se mueran? Ni al peor enemigo".

Luis Tosar ha liderado la presentación de esta tarde en Alicante sin su compañera Blanca Portillo, la otra gran protagonista de esta serie de À Punt y Televisión Española. El actor gallego cambia su acento por el alicantino para encarnar a Pepe Durà, el patrón del Francisco y Catalina que rescató a una patera y durante una semana de julio de 2006 estuvo pendiente de que les dejaran atracar en Malta.

Las autoridades se negaban porque había rescatado de una patera a 51 personas. La serie cuenta cómo fue aquello y la lucha legal que se inició y que acabó cambiando la legislación europea sobre migración. Ahora, 18 años después, se presenta este lunes y martes en las pantallas de À Punt, pero el drama sigue vigente. 

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Así lo recuerda Pepi Irles, la mujer de Pepe Durà, "no ha cambiado nada, no avanzamos en el tiempo. Seguimos viendo pateras y con la misma política". Su marido sigue faenando en altamar y se sigue encontrando con ese drama. "Y en esa zona las pateras no quieren subir al barco, pero si están en una situación de peligro, se cogen a lo que ven. ¿Qué vas a dejarlas, que se mueran? Ni al peor enemigo", sentencia.

Tosar ha contado que cuando se produjo esta historia la siguió como toda España en los medios de comunicación. Luego se emocionó aún más con el documental Radio Malta, un trabajo también rodado en los estudios Ciudad de la Luz, "y pensé que había un material narrativo bueno y un mensaje sanador que era bueno que se contara".

El productor Enrique Domingo, conocido por su apodo de Flipy, es el que ha hecho posible que ahora se pueda contar a través de la ficción. "Me enganchó la historia humana", ha recordado en la rueda de prensa. Y ese documental es el que le empujó a seguir con este propósito: "Vi que había muchas aristas que se podían contar con una serie, no solamente la relación de los migrantes, cómo lo vivieron las mujeres y su familia porque movilizaron a la opinión pública y una noticia que no hubiera trascendido, se convirtió en una nacional".

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Ahora vuelven a cobrar protagonismo con esta serie que tras À Punt estrenará Televisión Española. Tosar valora que con este formato de tres episodios "es muy trepidante, pero con tiempo suficiente para entrar en la emoción de la historia". Un logro del que agradece como un lujo la colaboración de Durà e Irles "que nos mostraron algo que no fue tan cómodo como lo contamos ahora". "Porque Pepe lo cuenta como si no hubiera pasado nada: 'salvamos a unos emigrantes en apuros'. Nos pareció extraordinario cuando no debería ser así porque nos hemos acostumbrado a que no lo sea, tristemente, pero por suerte aún hay personas que lo hacen".