Un cambio que obedece "a meros intereses personales y de pugnas internas en el seno de Compromís". Así define la plataforma de Docentes por la Libertad Lingüística la dimisión del conseller Vicent Marzà a quien critican duramente por su gestión y por el momento escogido para abandonar el área de Educación en la Generalitat.
El comunicado de la DLL arranca sentenciando la figura del conseller asegurando que "resulta difícil encontrar una figura para este relevo que empeorase la insignificancia intelectual de Marzà y su escasa preparación". Ahí le han echado en cara "que su experiencia laboral como docente ha sido poco menos que anecdótica".
La actitud de Marzà sobre el uso del valenciano en la enseñanza también ha sido objetivo de las críticas del colectivo. Ahí consideran que ha demostrado "sobradamente" su negligencia jurídica "así como el escaso respeto a la ley". Una actitud que, añaden, "le ha llevado a cosechar el mayor número de sentencias condenatorias que ha recibido ninguna Conselleria en toda la historia de la democracia".
A un año de la convocatoria de las elecciones en la Comunidad Valenciana, si se sigue el calendario, DLL critica que "el momento elegido por Marzà para su salida coincide con el peor instante posible para la educación valenciana". ¿Las razones? "Un cambio de ley pendiente de aplicar, innumerables interrogantes y dudas por aclarar y a pocos días de iniciar los procesos de matriculación sin que se hayan resuelto gravísimas cuestiones", argumentan.
"Nulo interés"
La DLL concluye por estas ideas que "Marzà decide anteponer sus intereses personales y los de su partido al futuro de los niños y jóvenes de nuestra Comunidad". Un razonamiento que, "evidencia también en su despedida su nulo interés por la educación, que ha sido para él un mero instrumento de adoctrinamiento para la imposición de su ideología nacionalista".
Si al conseller saliente le condenan por estas razones, el colectivo también alude a quienes permanecen. Y por eso considera que es "más que evidente que el verdadero conseller en la sombra seguirá siendo el secretario autonómico, el socialista Miguel Soler". A este le acusan de una "larga trayectoria de mentiras y engaños a los padres". Y respecto a Raquel Tamarit, la que será sustituta en el cargo, le piden una entrevista para saber si es "su intención mantener la misma política de su predecesor y humillar a los valencianos convirtiendo nuestra Comunidad en un territorio colonial de esa ensoñación llamada los Países Catalanes".
Las reclamaciones
El comunicado de la plataforma finaliza con una serie de exigencias "a quienes quieran oírnos". La primera de ellas, dirigida a la norma sobre el plurilingüismo en la Comunidad Valenciana para la que piden "la derogación de la ley 4/18 por vulnerar los derechos ciudadanos, así como su sustitución por otra que sí respete el derecho de elección de lengua que tienen las familias".
En segundo lugar, reclaman "la eliminación del requisito lingüístico para garantizar la igualdad en el acceso a la función pública y la movilidad territorial para todos los españoles".
En el tercer punto piden "la defensa de la lengua valenciana, sustituida por el catalán en el sistema educativo". Y, por último, "la obligatoriedad de que la Administración realice sus comunicaciones en las dos lenguas oficiales, sin discriminar a la mayoría de los valencianos que tiene el castellano como lengua materna".