Alicante

Ritmo hizo historia entre las orquestas sinfónicas en España con cinco nominaciones a los premios Grammy y dos galardones de la Academia de la Música. Ahora, la ciudad de Alicante recupera el concierto que lo puso en marcha en una oportunidad única para vivir de nuevo este proyecto gracias al festival Fijazz.

Ritmo solo se ha representado en dos ocasiones anteriormente, en 2021 y 2023, y como explica el director del ADDA Simfònica Josep Vicent "era para mí un proyecto cerrado porque ya es propiedad de las almas de los que aman a Chick Corea. No pensaba en breve ponerlo de nuevo en pie".

El tremendo éxito en la temporada de premios ha hecho casi inevitable que se intentara poner de nuevo en pie la propuesta que une a la formación con Paquito D'Rivera y el trío de Emilio Solla. "Desde el momento en que lo acabamos, empezaron prensa y festivales de fuera de España a decir que lo querían programar y cuándo se podía hacer", apunta Josep Vicent, "así que ha sido a petición popular y lo entiendo porque es la unión de un colectivo que es muy difícil de juntar y cada vez lo será más".

La cita en Alicante la califica de "un hecho histórico simplemente por los ingredientes que forman parte" y asegura que "estoy emocionado por salir de nuevo con una gran banda ya rodados en conjunto". Eso será el sábado 20 de julio cuando se reencuentren todos y que servirá de calentamiento para "uno de los festivales más importantes del verano europeo, en Liubliana".

El trabajo hecho con Ritmo: The Chick Corea Symphony Tribute, lo que incluye los arreglos de Emilio Solla con los que fue nominado al Grammy Latino, "es patrimonio de la fundación ADDA". Como explica el director, eso es lo que hace que haya una demanda por parte de otras formaciones para interpretarlos. Y ese es el caso, avanza, de la orquesta de RTVE que ya está preparando una producción a partir de estas partituras.

Desde la tranquilidad que aporta el éxito, Josep Vicent echa la vista atrás en su despacho a lo que supuso reunir a estos músicos en 2021, con las restricciones por la pandemia aún vigentes y complicando una agenda internacional. "Si miras con la lógica, pensarías que seguramente era difícil y el peor momento y cómo se encontraron las fórmulas y que saliera como salió", razona.

El amor lo hace posible

Ese no es el planteamiento desde el que surgió este tributo a la obra de Chick Corea, como recalca el director de Altea. "Pasa como en el amor, cuando sientes la inspiración no ves las dificultades. Y para mí es un proyecto que era un sueño para hacer desde muy joven y sabía que iba a ser muy especial. En ese momento no veía dificultades porque lo enfocamos con energía".

Si lo describe desde el corazón, cuando deja que la cabeza retome el mando explica que "la dificultad interpretativa de Ritmo no es tanto en las piezas concretas sino en el edificio". Las doce pistas que componen la grabación demuestran que "es un proyecto con mucha variedad y como director lo que tiene dificultad es que esté en equilibrio y que sea un viaje global, una gran sinfonía".

Estos tres años desde que se hiciera público el viaje de Ritmo han confirmado un punto de vista a Josep Vicent. "Me ha consolidado en la idea de que la diversidad es una riqueza enorme, de que la apertura de miras con el deseo de aprender es una riqueza enorme y que no hay límites entre estilo y que los únicos límites los tenemos los humanos". Por eso concluye que "siempre has de seguir puliendo", como demostrará con este nuevo concierto.