El deporte español despide a uno de sus entrenadores más exitosos del siglo XX, Pedro Ferrándiz. Nacido en Alicante en 1928, pasará a la historia por un palmarés que marcó una época en las décadas de los 60 y 70. Su herencia aún pervive en la ciudad con una cátedra en la UA y el pabellón del Centro de Tecnificación a su nombre.
El alcalde de Alicante, Luis Barcala, ha expresado este jueves su consternación por la muerte a los 93 años de Ferrándiz en la ciudad que le vio nacer. El entrenador más laureado en la historia del baloncesto español tuvo bajo su mando al Real Madrid durante 13 temporadas en tres diferentes etapas (1959-62, 1964-65 y 1966-75). En ese tiempo conquistó un total de 27 títulos: doce Ligas, once Copas y cuatro Copas de Europa.
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"La triste noticia de la muerte de Pedro Ferrándiz deja huérfano al baloncesto español y una profunda huella de reconocimiento y gratitud en la ciudad de Alicante que le vio nacer", ha destacado Barcala en un comunicado enviado por el Ayuntamiento de Alicante. "Nos deja el entrenador más laureado en la historia de este deporte en nuestro país y también se marcha una excelente persona, querido y respetado por todos los que le conocimos".
Barcala se ha referido a Ferrándiz como "un pionero, un innovador y casi un revolucionario" como entrenador de baloncesto. "Llevó al Real Madrid a lo más alto del escalafón nacional y mundial durante sus 13 años en el equipo blanco y paseó el nombre de Alicante con orgullo por todas las canchas de España y Europa", ha añadido.
El primer edil ha recordado que el Ayuntamiento otorgó su nombre al pabellón deportivo de referencia de nuestra ciudad "y todos los alicantinos nos sentimos profundamente orgullosos de su gran legado humano y deportivo, que es eterno".
Su trayectoria
Ferrándiz siempre se definió como un amante del baloncesto y una persona entregada al deporte, pero también al Real Madrid. No solo fue técnico del primer equipo, sino que también pasó por las categorías inferiores del club. Llegó a la entidad merengue en 1955 e inició un proceso de formación que duró otras cuatro temporadas hasta que tomó las riendas de la sección.
Su importancia para los banquillos y para el baloncesto trascendió las barreras del club de la capital e incluso de España, ya que Ferrándiz pasó a ser conocido mundialmente como una auténtica institución y como una referencia absoluta. Después de convertirse en el número uno de su promoción de entrenadores en el programa nacional, se graduó como profesor de Baloncesto del Instituto Nacional de Educación Física y terminó fundando la Asociación Mundial de Entrenadores de Baloncesto, de la que sería su primer presidente.