La ciudad de Alicante homenajea a los campeones por todo lo alto. Los héroes del ascenso han sido arropados por cerca de 6.000 herculanos en la recepción oficial de la plantilla en el Ayuntamiento de Alicante. El consistorio ha reconocido la gesta  conseguida el domingo por el Hércules con un acto en el que se ha mostrado el orgullo de la ciudad por el salto a Primera RFEF.

Tras la resaca de éxito y el baño de masas en Luceros, los jugadores de Rubén Torrecilla han llegado en un autobús descapotable, como cuando se consiguió el último ascenso a Primera División hace 14 años y han salido al balcón para celebrar el campeonato liguero con los aficionados reunidos en la plaza del Ayuntamiento.

La plantilla ha sido recibida por la corporación municipal en un acto en el Salón Azul del consistorio. "¡A segunda oe, a segunda!" o "¡campeones, campeones!" han sido parte del repertorio de cánticos que han sonado cuando se han asomado al balcón. Nico, Carlos Abad, Richi y Marcos Mendes se han dirigido a la afición, siendo el entrenador que ha sacado del pozo al equipo, Rubén Torrecilla, el más querido. Samu Vázquez, a quien los herculanos han pedido que se quede, y el martillo de Josema también han sido protagonistas.

Minutos antes, el alcalde de Alicante, Luis Barcala, ha señalado que "el Hércules es más que un club, es un sentimiento que todos los alicantinos tenemos en el corazón". "Hicisteis un partidazo y nos habéis regalado sentirnos orgullosos del Hércules y de la ciudad de Alicante", ha manifestado el primer edil. Barcala ha recordado los 14 años de "sufrimiento" que han tenido que pasar hasta revivir este sentimiento y ha indicado que "aquellos que en Ponferrada lloraban de tristeza, hoy lloran de alegría".

Nico Espinosa, uno de los capitanes, ha agradecido el recibimiento del Ayuntamiento, mientras que el presidente, Carlos Parodi, ha asegurado que esto solo es "un escalón más en el camino al fútbol profesional", donde se merece estar "un equipo centenario", y se ha acordado de Enrique Ortiz, quién "ha asistido a más entrenamientos que algunos jugadores". Además, ha entregado una camiseta conmemorativa al alcalde como recuerdo.

Por su parte, el concejal de deportes, Toni Gallego, ha resaltado que es "un honor". "Para los que hemos estado vinculado al deporte, sabemos los altibajos y los nervios de los últimos partidos, pero esto es la mayor recompensa que puede haber, fue un día histórico que los alicantinos nos vamos a acordar toda la vida".