Rubén Torrecilla.

Rubén Torrecilla.

Hércules CF

El Hércules entra en recesión en el momento clave de la temporada

Pablo Verdú
Alicante
Publicada

El temido Tourmalet de noviembre se le está atragantando al Hércules, que se ha cortado del pelotón de cabeza en las primeras rampas del exigente mes de noviembre. La derrota ante el Villarreal B (0-2) se une a las sufridas ante el Atlético B y Fuenlabrada, además del KO copero ante el Ejea, en lo que ya es la peor racha de resultados desde la llegada al banquillo blanquiazul del técnico Rubén Torrecilla.

Nunca antes el cacereño había sufrido una dinámica tan negativa, solo comparable a las tres derrotas que enlazó en enero del pasado curso, ante Espanyol B, Formentera y Torrent, que alejaron al Hércules en aquel instante de la pelea por el liderato.

Más allá de la coartada arbitral, válida exclusivamente para el último partido ante el Villarreal B, el Hércules está teniendo un grave problema futbolístico. Los goles de Soldevila en las primeras jornadas camuflaron algunas carencias evidentes del equipo, que no logra imponerse en ninguna de las dos áreas. Nervio, actitud y entrega no faltan, pero sí otras muchas cosas.

Torrecilla se resiste a hablar de crisis y apunta que la caída clasificatoria de su equipo, que ya ve por el retrovisor los puestos de descenso, solo es fruto de una mala racha. “Cualquier error va en contra nuestra. No estoy preocupado porque no veo un equipo que se arrastra en el camp”, afirma el preparador.

El cacereño, tal y como hizo el pasado curso en un momento crítico, volvió a apuntar a los errores arbitrales como causantes de los malos resultados. “Cualquier error va en contra nuestra y estoy cabreado. Estoy harto, no es normal que te anulen ese gol”, indicó en referencia al tanto marcado por Montoro y que no fue validado por el árbitro por un fuera de juego inexistente.

Cambio de inercia

Por suerte para el Hércules, el miércoles tiene una nueva oportunidad de quitarse de encima las dudas que ya empiezan a sobrevolar el Rico Pérez. Recibe al Marbella, en el partido aplazado en su día por la dana, en una semana clave que culminará, el domingo, con la visita al Recreativo de Huelva, otro histórico en horas bajas.

“Hay que levantarse y cambiar la inercia. Si ganamos el miércoles todo se verá de otra manera”, apunta el entrenador extremeño, quien insiste en defender a sus jugadores a pesar de los resultados.

Más allá del discurso pasional y vehemente del técnico, el último mes y medio del Hércules ha dejado demasiadas sombras. Más allá de Soldevila parece no haber luz en ataque, mientras la defensa, sobre todo por el perfil izquierdo, se resquebraja con relativa facilidad.

El medio centro defensivo Mario García, lesionado por una dolencia en el cuádriceps, no tiene relevo natural en la plantilla, y jugadores como Roger o Aranda, que arrancaron el curso desatados, han perdido brillo. Otros que siguen del pasado curso parecen haber encogido con el cambio de categoría y algunos de los nuevos, como a Dani Romera o Angong, se les sigue esperando.

El equipo no es un desastre, se lo deja todo. Si ganamos nos metemos en la pelea. Hay que seguir y mirar para adelante porque esto lo sacamos entre todos. No tengo dudas. Si las tuviera, el primero que se aparta soy yo”, afirma Torrecilla, que se ha ganado el beneficio de la duda tras revertir el pasado año una situación bastante más comprometida que la actual.