"Hay que estar concentrados y metidos los noventa y tantos minutos que duren los partidos. Cuesta mucho ganar". Esta frase, repetida en forma de letanía por el entrenador del Hércules, Rubén Torrecilla, en cada rueda de prensa se ajusta a la realidad que está viviendo el equipo alicantino en la temporada de su estreno en Primera Federación.
Desde la llegada de Torrecilla, el Hércules ha llevado los partidos a finales de photofinish. Ya sucedió el pasado año, con victorias inolvidables como la de Alzira, que provocó una reacción en cadena que llevó al Hércules hacia el ascenso. Pero también para mal, como las derrotas en casa frente a Formentera y Penya Independent.
Pero lo de esta temporada es exagerado. De los 18 partidos disputados hasta el momento, siete se han resuelto en los últimos diez minutos, incluidos los descuentos.
La sensación que queda es de amargura, porque el Hércules tiene recientes las heridas de Huelva, Mérida y Sanlúcar, pero la realidad es que el equipo de Torrecilla ha ganado casi tanto como ha perdido en los minutos de la verdad.
Al Hércules se la han escapado puntos en el tramo final en los encuentros ante el Atlético de Madrid B (1-2), en Huelva (2-1), Mérida (2-1) y Atlético Sanluqueño (1-1).
Frente al filial se escapó un empate que era un mal menor tal y como había ido el partido, ante el Recreativo fueron dos puntos en un duelo que parecía controlado, en Mérida voló el empate en el alargue y en Sanlúcar un triunfo casi asegurado. En total, siete puntos menos.
Pero el conjunto alicantino, aunque no lo parezca, también ha sacado tajada de estos momentos decisivos, en los que lo pasional se impone a lo táctico. Ganó al Antequera, actual líder del grupo, en el descuento con un gol de Soldevila (1-0) y en Algeciras, también transitando por el tiempo extra, con un tanto desde fuera del área de José Artiles (2-3).
Hace apenas una semana, el Hércules tumbó al Deportivo Alcoyano (1-0) con una diana de Dani Romera en el tiempo de prolongación.
El Hércules ha llegado al parón navideño en la octava posición, aunque a un solo punto de la zona de promoción de ascenso. La sensación es que con un poco más de ambición, acierto o fortuna el equipo puede llegar a la pelea por el ascenso.
Si la próxima jornada, ya bien entrado enero, es capaz de derrotar al Betis Deportivo tendrá muchas opciones de cerrar el primer giro del campeonato entre los favoritos.
Y si es capaz de controlar mejor las emociones en los últimos minutos de los partidos, sobre todo cuando el marcador está a favor, el equipo de Torrecilla está a tiempo de todo.