El remozado proyecto del HLA Alicante ya vela armas para lo que será su estreno este viernes en el Centro de Tecnificación ante el Rioja Clavijo. Tras una temporada ilusionante, coronada por una prestigiosa victoria ante el Movistar Estudiantes (79-63), el nuevo equipo diseñado por Asier Alonso, director deportivo, y Antonio Pérez Caínzos, entrenador, parece afinado para afrontar el reto de volver a enamorar a la afición alicantina.

El proyecto no tiene techo. El presidente, Dani Adriasola, sólo exige al grupo entrar en el playoff y que sea fiel a los principios que han caracterizado a la franquicia desde su fundación, sobre todo como local. “El HLA Alicante debe ser un equipo intenso, que contagie y que transmita”, señalan desde la entidad como premisa.

El equipo necesitará tiempo para ajustarse, ya que sólo Edu Gatell repite del pasado curso. El pívot, además de su calidad, gana peso específico en el equipo en cuestiones intangibles, ya que será el encargado de liderar en la pista y fuera de ella a un grupo joven y sin complejos.

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El HLA Alicante ha juntado en su vestuario a jugadores de ocho nacionalidades, ya que a los españoles Edu Gatell, Migue Serrano y Adrià Rodríguez se suman los estadounidenses Tyler Harris y Brad Davison, el checo Richard Balint, el canadiense Kevin Bercy, el sueco David Hook, el islandés Jon Axel Gudmundsson, el senegalés Mus Barro y el búlgaro Kostin Kostadinov. A la espera de oportunidades, como jugadores del filial, están los júnior Tiago Dias, portugués, y Vakar Voronin, ruso.

Tras las decepcionantes experiencias vividas en las últimas temporadas, el club alicantino ha optado por volver a sus orígenes, aparcar a los jugadores ya contrastados en la competición y apostar por gente con “hambre” y ganas de triunfar en el baloncesto profesional.

Alonso, que llegó al club el último día del pasado mes de junio, ha buceado por todo el baloncesto FIBA en busca de jugadores para construir su proyecto. Sólo el base Tyler Harris no tiene experiencia europea. Todos los demás han competido internacionalmente, aunque son los pívots Mus Barro y Gatell, dominantes en la competición LEB Oro, los que aportarán la dosis de experiencia a la plantilla.

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Las sensaciones que transmite el equipo son excelentes, lo que ha provocado que la afición comience a ilusionarse a pesar de que el balón aún no se ha lanzado al aire en la competición oficial. La idea de Pérez Caínzos, que regresa como primera espada tras varios años de entrenador ayudante, es que el HLA Alicante practique un juego alegre, ofensivo y enérgico, a años luz de lo que se vio en los últimos tiempos en Alicante. Para eso necesitaba sangre joven y frescura.

El técnico ferrolano se asegura una gran producción de puntos desde el lanzamiento exterior con francotiradores como Gudmundsson, Davison y Harris, pero también desde la zona. En defensa, la hiperactividad y las ayudas son una constante en un equipo que, por lo visto, vivirá instalado en el vértigo.

Pese a las buenas sensaciones y la ilusión que genera el proyecto, el HLA Alicante no parte como candidato al ascenso, pero sí para meterse en los playoffs –entre los nueve primeros–. Estudiantes, San Pablo Burgos, Fuenlabrada, Real Betis, Leyma Coruña o Lleida, entre alguno más, cuentan con más presupuesto y mejor plantilla, en teoría. Con los pies en el suelo, pero sin miedo ni complejos, el HLA Alicante inicia este viernes (20:45 horas) su viaje más estimulante de los últimos años.