No va a más en el Pitiu Rochel. El legendario pabellón alicantino, reformado hace apenas mes y medio, despedirá la División de Honor Plata esta temporada con el mejor partido posible que se puede vivir en la ciudad: el derbi entre el EÓN Horneo Alicante y la Fundación Agustinos este sábado (19:00 horas). El partido es un salto sin red para el conjunto colegial, al que le va la permanencia en 60 minutos.

A dos jornadas del final, Agustinos está fuera del descenso, por lo que asegurará la salvación en la categoría si es capaz de sumar los últimos cuatro puntos en juego. Ganar al EÓN, descabalgado la pasada jornada de la pelea por el ascenso, le permitirá depender de sí mismo en la última jornada ante Antequera, que no se juega nada.

El EÓN, tras perder de vista el tren del ascenso, no quiere sorpresas ni angustias de última hora, como el pasado año, y pretende eludir cuanto antes la posibilidad de una promoción de permanencia. Un punto o dos de los cuatro en juego pueden ser suficientes y los de Latorre quieren asegurarlos cuanto antes y, a ser posible, en el último partido ante su gente.

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El EÓN es local, pero Agustinos desplazará al Pitiu Rochel a una legión de aficionados, casi todos jugadores de sus categorías inferiores, para que su equipo se sienta como en casa. "Nosotros nos jugamos más y eso se tiene que notar", afirma Israel González, presidente de la entidad colegial, cuna del balonmano alicantino.

El equipo que entrena Alejandro Carrillo llega el duelo recuperado en su autoestima tras ganar al Mallorca y romper la racha negativa que le llevó de ser la revelación a coquetear con el descenso. "Son dos puntos cruciales para nosotros. No es el mejor escenario posible, porque jugamos fuera y ante un equipo como el EÓN, pero en realidad es que jugaremos casi en casa", señala el dirigente, quien apunta a la Copa del Rey, competición en la que Agustinos realizó un papel brillante, quedando a las puertas de la fase final, como responsable del bajón del equipo en los dos últimos meses.

"Nos descentró porque te saca de tu sitio y de tu día a día. Le ganas al líder de la categoría en la Copa y luego te toca Bidasoa, y eso hace que te despistes en la Liga", argumenta González, quien también admite que el torneo le vino bien al club "para tener visibilidad".

En cuanto al partido de este sábado, Israel González recuerda que es un derbi y que "puede pasar de todo". "Fernando Latorre ha sido jugador y entrenador nuestro y nos conoce mejor que nadie. Y lo mismo nos pasa a nosotros con varios de sus jugadores, como David Jiménez. Que nadie piense que será fácil, porque cuando empieza el partido nadie baja los brazos y quiere perder, aunque ellos no tengan objetivos clasificatorios ambiciosos por lo que luchar", reflexiona el presidente de Agustinos.

"A Alicante le viene bien tener dos equipos en esta categoría, como también le vendría bien tener uno en Asobal y otro en la División de Honor Plata", asegura el dirigente, quien elogió la plantilla del EÓN y está convencido de que a medio plazo logrará el éxito. "Con un capitán como Fernando no me cabe duda. Hay que recordar que cambiaron a 14 jugadores y eso lleva un tiempo", explica.

La salvación para Agustinos, un club formador, no es una cuestión de vida o muerte, como sí sucede en otras entidades, aunque González considera que es obligado defender la categoría "porque ayuda a que los chicos de la cantera quieran llegar arriba para competir contra grandes equipos".

Prisa por cerrar la temporada

Latorre, en su primera temporada en el club, ha sentado la base de un proyecto que aún debe crecer. El primer paso es asegurar la salvación, algo que parece encarrilado, aunque el alicantino no quiere sorpresas ni carambolas. Califica el derbi como "bonito sobre todo para el espectador" y pronostica un duelo intenso en el que ambos equipos necesitan los puntos. "Va ser un partido intenso porque ellos necesitan sumar para evitar el descenso y nosotros para no acercarnos a la promoción", recuerda.

"Estamos concienciados de que no podemos esperar los resultados de los demás equipos, porque a veces pasan cosas que no esperas. Queremos sumar cuanto antes los puntos y evitar cualquier riesgo", insiste el técnico. "Va ser un duelo con muchos alicientes y cosas en juego. Un partido así es bonito para el balonmano alicantino", añadió Latorre.

En la primera vuelta, el EÓN logró ganar en la pista de Agustinos y devolver el golpe a su rival ciudadano, ganador de los dos amistosos disputados en la pasada pretemporada. Las entradas para este partido de máxima rivalidad ciudadana se pueden adquirir en la taquilla del pabellón a un precio de cinco euros.