Alicante

El ciclismo de la provincia de Alicante está de enhorabuena. Tras unos años de sequía, el trabajo de cantera comienza a dar sus frutos. Primero irrumpió el javiense Juan Ayuso, ya consolidado en el pelotón internacional a sus 22 años, y ahora aparece echando todas las puertas abajo Héctor Álvarez (Alfaz, 2006), el mejor ciclista júnior del año 2024.

El alfasino, ganador de 20 pruebas este año y subcampeón de Europa de fondo en carretera, ha mejorado a su edad los registros que a su misma edad firmaron mitos como Induráin, Contador o Valverde.

A partir de esta semana comienza una nueva vida tras haber firmado por el conjunto estadounidense Trek. "Ahora comienza lo difícil", afirma a EL ESPAÑOL de Alicante un purasangre llamado a marcar una época en las clásicas.

Igual no es consciente aún, pero lo que ha hecho este año pasará a la historia del ciclismo español. ¿Cómo se siente?

No me esperaba estos resultados. Yo también estoy sorprendido. Un año con tantas victorias no es fácil. Hemos trabajado bien, pero no ha sido fácil porque hay mucho nivel. Acabar el año con el número uno del ranquin con los corredorazos que hay en el pelotón es algo increíble.

¿Qué siente cuando oye que ha mejorado los registros de Induráin, Valverde o Contador a su misma edad?

Me da un poco de miedo que me comparen. Ves todo lo que ellos hicieron y eso me queda aún lejísimos. Es otro mundo. Otro ciclismo del que me veo a mucha distancia.

Ahora empieza una nueva etapa, ya integrado en la estructura de un equipo profesional. ¿Cómo se siente?

Pues con mariposas en el estómago. Ahora empieza lo difícil, pero mi mentalidad es la de seguir aprendiendo para intentar estar con los mejores.

Las clásicas

¿Quién es su corredor favorito del pelotón actual?

Me fijo mucho en Oier Lazkano. Él también ha ido creciendo poco a poco y se ha convertido en un clasicómano.

Dicen los expertos que su futuro está ahí, en las clásicas de un día.

Sí, ese puede ser a lo mejor mi rol. Pero veremos cómo se me da el ciclismo profesional. Soy muy joven aún y las cosas pueden cambiar.

Ha ganado una barbaridad de carreras este año, pero no oculta que tiene algunas espinas clavadas.

Sí. Sobre todo en el Europeo, que quedé segundo. Vi muy cerca el oro. También me vi con medalla en el Mundial, pero cometí errores y tengo que aprender de ellos.

Héctor Álvarez corriendo bajo la lluvia. Cedida

¿Se aprende más de estas derrotas que de algunas victorias?

Sin duda. En el Mundial no alimentarme bien me costó no poder superar las condiciones difíciles de la carrera. Y en el Europeo me equivoqué en el momento de esprintar. Fueron errores que debo ir puliendo. Para eso está esta categoría, para aprender y que no vuelva a pasar en el futuro.

¿Tiene ya claro el calendario del año que viene?

La próxima semana iré a Italia con el equipo a una concentración para conocernos y comenzar a ver el tema del tallaje y esas cosas. Supongo que allí ya comenzaremos a planificar un pre calendario. Una de las cosas positivas es que durante el invierno voy a poder entrenar en casa.

Su padre, director de la escuela de ciclismo de Alfaz, ha sido clave en su carrera. ¿Cómo lleva ahora lo de ceder el testigo de su formación a un club profesional?

Bien, ilusionado, como todos. Sabe distinguir bien y desconectar. Pero sigue siendo muy exigente, sobre todo con los estudios.

Con el futuro que se le ha abierto en la ruta, ¿dirá adiós a la pista?

No, mi idea es seguir. Llevo toda mi vida en la pista, desde infantiles, y me gustaría estar el mayor tiempo posible compaginando las dos cosas.

En los próximos Juegos Olímpicos tendrá 21 años. ¿Se ve en Los Ángeles?

Ese es mi sueño, estar en los próximos Juegos, ya sea en ruta o en la pista. Es casi imposible estar en las dos, porque para competir en pista hay que echarle muchas horas y estar al cien por cien centrado en esta modalidad.

¿Cómo lleva pasar de ser uno más del pueblo a toda una celebridad?

Con normalidad, es un orgullo que la gente de mi tierra me conozca un poco más y se interese por cómo me va en las carreras.

Tantas emociones, premios, cambios, entrevistas, contratos… ¿Siente que le está cambiando la vida?

Puede ser, aunque soy una persona bastante fría para estas cosas. Es posible que se hable más de mí en los medios. Pero soy el mismo. Me gusta ir poco a poco y no descentrarme.