¿Hay un plan para acabar con el trasvase Tajo-Segura?
No lo sé, pero pareciera. Desde luego si hacemos caso a las opiniones vertidas por los políticos de Castilla-La Mancha, habría que pensar en esa posibilidad. De hecho, esta misma semana estuvo su presidente en Valencia, en una reunión con los empresarios valencianos y volvió a reiterar sus críticas al trasvase. Se le echaba de menos. También habló de un trasvase intercuencas en toda España. No me parece mala idea. Le animo a seguir por ahí.
Sí, dijo que si a Madrid le faltase agua, el problema del agua en toda España estaría solucionado ¿Hay cierto centralismo en materia de políticas hídricas?
Totalmente convencido. El desconocimiento desde la capital de buena parte del resto del país, por ejemplo, en qué consiste o cómo se ejecuta el regadío en el Levante, es muy grande. Aquí parece que derrochamos el agua cuando tenemos los sistemas de regadío más avanzados de Europa en I+D+i. Aquí el regadío paga los costes más elevados del país por metro cúbico. Creo que es injusto ese desconocimiento.
Lo que sí que parece que hay es un plan predeterminado para sustituir agua de trasvase por agua desalada...
Es curioso que todo el esfuerzo en desalación de Europa está centralizado aquí en el Levante, y algo en Canarias. Nuestro empeño pasa por aprovechar cualquier recurso siempre y cuando se cumplan con dos condiciones básicas. Primera, que tenga la calidad requerida para nuestros cultivos; y segunda, que tenga un precio asumible para la agricultura en general. No me vale que únicamente una élite pueda pagarla.
¿Y no es así?
Un uso exclusivo del agua desalada significaría poner en riesgo algo tan importante para el Levante como es su riqueza arbórea cítrica por su alto contenido en boro. Y el precio, si el coste medio del agua en este país está entre 3 y 4 céntimos el metro cúbico para agricultura, en el agua desalada estamos hablando de 1,20 euros.
¿Qué opina de la defensa del agua por parte de los tres presidentes de las comunidades en las que están implantados los regantes del sindicato: Moreno Bonilla, López Miras y Ximo Puig?
Desde el sindicato central de regantes no se ven diferencias políticas en la defensa de los agricultores y de los regantes, entre la Comunidad Valenciana, la andaluza y la Región de Murcia. No tengo queja. Puig ha manifestado su apoyo incuestionable al trasvase.
¿Pero en Madrid se oye más la voz de Castilla que la del Levante?
La ministra Teresa Rivera se ha posicionado más con Castilla-La Mancha que con el Levante español. No puedo decir que se trate de un fallo o un lapsus, porque si algo caracteriza a la ministra Ribera es su inteligencia. Ya en el año 2018 desequilibró la balanza a favor de Castilla-La Mancha situando en una comisión técnica a un delegado político que nada entiende de lo que allí se discute y que únicamente sirve para alterar los ánimos de los técnicos.
“Llevamos cerca de 30 sentencias recurridas y perdidas por Castilla-La Mancha y yo creo que nadie le está diciendo nada de eso al ciudadano manchego”
Cuando ustedes hacen una manifestación en Madrid, como la que se produjo en primavera, ¿por qué no llega la voz del Levante a la Moncloa?
Yo creo que nuestras manifestaciones han sido sentidas en el Gobierno. Prueba de ello es que ha habido sendas reuniones en las que se nos plantean líneas de trabajo. El problema es que siempre están orientadas hacia la desalación.
¿El principal problema es el incremento de caudales ecológicos del Plan de Cuenca del Tajo?
Su incremento en algunos tramos del letal, es un incremento político porque la técnica deja claro que esos tramos son en los que mejor está la calidad del agua de todo el río. Y mientras, los rebajan con respecto a las expectativas originarias de la planificación, en todos los otros los tramos del río Tajo. Precisamente aquellos que están en una situación mucho peor. Son incrementos políticos porque hay que escuchar la declaraciones y las bravuconadas tanto del consejero de Castilla-La Mancha como del propio presidente, cuando han afirmado que la planificación ha resultado de sus negociaciones los despachos políticamente.
Pero enfrenta comunidades.
Socialmente es algo que no está tan presente en la vida de Castilla-La Mancha, pero los políticos lo han usado como una línea estratégica para ganar elecciones desde los tiempos de Barreda. Yo recuerdo campañas nefastas, contratando helicópteros y grabando balsas… Qué contradicción, porque nuestras balsas son embalses de regulación, algo que exige un regadío moderno. Ya no tiramos el agua al bancal haga falta o no. Ahora lo hacemos gota a gota. Fue una campaña de manipulación publicitaria tremenda, pagada por una comunidad autónoma que se viene empeñando en crear una bandera identitaria con el tema de el agua.
¿Cómo puede no ser un tema social pero sí que sirva para ganar elecciones?
Yo creo que la sociedad vive un poco al margen de toda esta batalla que tienen sus líderes políticos. De hecho, no sé si llevaremos cerca de 30 sentencias recurridas por Castilla-La Mancha y perdidas por Castilla-La Mancha y yo creo que nadie le está diciendo nada de eso al ciudadano castellano manchego.
¿Son justas las reivindicaciones de los pueblos cercanos a Entrepeñas y Buendía para impulsar su turismo?
Los pueblos ribeños están alegrándose de haber conseguido elevar los caudales ecológicos como si eso fuera a representar una mayor película de agua en sus embalses, y va a ser al contrario. Ahora, al menos, cada vez que estamos a nivel tres, hay un volumen de agua de 400 hectómetros. A partir de la nueva planificación, si tiene que correr más agua por el río…
“Llevamos pagados 450 millones por el agua y no se ha hecho una inversión de 40 para que los pueblos de Entrepeñas y Buendía tengan agua potable”
La crisis del Mar Menor está poniendo en la diana en el Campo de Cartagena ¿se sustituirán los cultivos por plantas fotovoltaicas si sigue esta campaña en contra?
Es muy injusto el juicio sumarísimo que se ha hecho con la agricultura del Campo de Cartagena. Se trata de una de las agriculturas más tecnificadas del mundo y ha servido de ejemplo en las visitas promovidas por las autoridades nacionales y comunitarias. Si alguien puede hacer compatible el uso de la agricultura con la protección de un entorno tan privilegiado y tan querido para nuestra comunidad autónoma como el Mar Menor son los agricultores del campo Cartagena. Al final van a demostrar que no son los responsables de la situación del Mar Menor.
El mismo Ministerio que recorta el trasvase es el responsable de solventar el problema de la "España vaciada" o "reto demográfico". ¿Cómo serían hoy Almería, Murcia y Alicante sin el trasvase Tajo-Segura?
Los que tenemos ya una edad recordamos la foto en negativo de lo que era el Levante. Yo tengo un recuerdo muy claro de cómo eran los campos de mi pueblo. Había años en los que se podía vivir y años en los que había que emigrar. Si nos basamos en las informaciones del INE y analizamos datos desde 1972 o el 79 cuando llegaron las primeras aguas, te das cuenta de cómo cambió la historia. Ha habido un incremento de población del 45%. Eso solo ocurre por un hecho concreto. Fueron la llegada del agua y del trabajo. El trasvase ha generado nuevas formas de vida y arraigo.
¿Es consciente del cambio climático y de situaciones como las del verano extremadamente caluroso y seco de este año?
Desde el Scrats somos conscientes del argumento que pone sobre la mesa siempre el Ministerio. Pero lo que no puede pretender el Ministerio es adelantarse al cambio. Su herramienta de estudio es el Centro de Estudios Hidrográficos del CEDEX, que augura para los próximos 25 o 30 años una pérdida de caudales de en torno al 4-5%. Y el Ministerio propone una subida prácticamente del doble del caudal ecológico. Yo creo que hay que esperar a ver lo qué marca el cambio climático, no hacerlo por encima.
Hablamos de la cuenca más regulada de Europa con embalses, sistemas de retención del Estado, embalses de regulación de las comunidades de regantes. Todo lo que Europa dice que es la vía de futuro en esa lucha contra el cambio climático. Y el Ministerio opta por justo lo contrario. Opta por ponerse de espaldas a la ciencia y a la ingeniería. Vamos a alternar fenómenos climatológicos, como DANAs, con épocas de sequía. Lo que habrá que hacer es aprovechar esos momentos para retener agua y después poder disponer de ella en los periodos de sequía, eso es lo que manda la lógica.
¿El agua va a ser un tema decisivo en la próxima campaña electoral?
La planificación, tal y como la está contemplando el Ministerio, es muy contraproducente para el desarrollo de nuestras poblaciones. Vamos a vivir dramas sociales y daños medioambientales. Ellos han hecho una cuenta sencilla, si un metro cúbico produce tantos beneficios y tanto empleo, la desaparición de 100 millones de metros cúbicos da como resultado, tanto desempleo. Pero es que el engranaje del regadío levantino es mucho más complejo que eso. Variar la cantidad de agua provoca un efecto inmediato en el resto de recursos.
“Discutimos por 200 hectómetros que vienen al regadío del Levante cuando España tiene firmados con Portugal 2.700”
La propia Confederación está hablando de 10.000 y 12.000 desempleados. En este país hemos visto cómo el cierre una factoría de 200 trabajadores puede hacer mover todos los pies políticos de esa comunidad autónoma. El fin del Tajo-Segura sería muchísimo peor, con muchos miles de personas que irían al paro. ¿Qué ocurre? Que todavía no tienen cara no sabemos quiénes van a ser.
Si se concluye la tramitación de los planes como está diseñada, ¿cómo va a ser este otoño en cuento a movilizaciones?
El otoño va a ser muy caliente, y un 2023 también, porque vamos a echar todos los restos. Hablamos de un daño gratuito porque nos perjudica, no beneficia a Castilla-La Mancha y no beneficia para nada al país. Así que echaremos los restos para que la ciudadanía sepa quiénes son sus responsables. Si estuviera en juego la salubridad del agua del Tajo o las especies vinculadas a ese agua, no estaríamos hablando así. Aquí están en juego otras cosas.
¿Qué se hace con todo el dinero que los regantes de Almería, Murcia y Alicante pagan cada año por el agua del Tajo? ¿Cómo es posible que haya restricciones en los pueblos ribereños?
Nosotros hemos pagado cerca de 450 millones de euros. Es la única infraestructura hidráulica, junto con el Negratín-Almanzora de Almería, que recupera lo invertido. Dos terceras partes de ese dinero deberían de haber ido a Castilla-La Mancha. Llevamos dos años de litigios con el Gobierno pidiéndoles datos de dónde ha ido a parar ese dinero que debería haberse invertido para que los pueblos ribeños tuvieran agua…
De todos modos, lo que no se entiende es que a día de hoy creo que hay 470 hectómetros cúbicos en los embalses y esos pueblos tienen una población aproximada de 12.000 habitantes. Mientras, el abastecimiento del Levante con agua del Tajo para 34 municipios de Alicante, 43 de Murcia y 12 Almería, además de 12 de toda la zona de Mojácar-Vera-Garrucha, zonas turísticas y populosas, tan sólo necesitan 121 hectómetros cúbicos. ¿Cómo puedes ser que 12.000 habitantes tengan problemas de abastecimiento con 400 hectómetros siempre disponibles allí mismo? La única explicación es que no se ha invertido en sistemas de captación adecuados para que llegue agua potable, pese a que nosotros pagamos millones de euros para eso. Evidentemente, ese dinero ha tenido otros destinos.
¿Por qué García-Page abomina tanto del Tajo-Segura y reclama otros trasvases como el de las Lagunas del Ruidera?
El Tajo-Segura convive con otros 39 trasvases muy importantes, pero es el único que genera este tinglado político aquí en España. Sobre él siempre hay una sombra porque atraviesa varias autonomías. Estamos hablando de una cantidad de agua ridícula. Fíjate que de media estamos recibiendo 205 hectómetros cúbicos para regadío, y por el Tratado de Albufeira, España tiene firmado con Portugal la llegada a sus fronteras de 2.700 hectómetros cúbicos todos los años, cifra que se ve incrementada habitualmente hasta llegar a los 7.000 y 8.000 y 9.000 millones de metros cúbicos año a la frontera. Y nosotros en este país estamos permanentemente discutiendo entre comunidades hermanas de toda la vida por 200 pírricos hectómetros. La culpa de todo esto el embarre político que ha habido siempre.