La sequía está golpeando muy duramente al campo en la provincia de Alicante y provoca un efecto que está resultando demoledor en el caso de la uva moscatel de secano. Los conejos están devorando este cultivo ante la falta de alternativas con las que alimentarse. Así, el sindicato Asaja alerta de una merma del 85 % de producción.

La gravedad de este ataque en concreto está en que esta variedad "es una uva de altísimo valor económico y muy demandada por los mejores y más selectos mercados nacionales e internacionales", como indican desde el sindicato. El ataque de esta especie no está permitiendo el desarrollo del cultivo.

La asociación agraria ha visitado las zonas que más lo están sufriendo. En el área de Vall de Pop, estiman que una cooperativa sufrirá una pérdida de producción de 2 millones de kilos de las variedades de uva Moscatel y Giró para vinificación. Ese es el caso de la de Xaló, que cuenta con 400 hectáreas y donde señalan la voracidad de estos animales como causa.

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El encarnizamiento de los conejos con la uva tiene su base en la falta de lluvias que provoca que no haya hierba ni vegetación con la que alimentarse. En los viñedos han encontrado un recurso para subsistir y aprovechan que estos no crecen en alto como pasa en zonas como Novelda. Los animales alcanzan perfectamente y así lo aprovechan sin freno.

El daño no se confina a Xaló, en Llíber o en Teulada, debido a su clima cálido, su proximidad a la bahía de Moraira y el influjo del viento del llebeig, es uno de esos lugares donde la moscatel en fresco puede expresarse en su máximo esplendor. En esta zona se ha producido un destrío que equivale a 1,2 millones de kilos por las mismas causas que en Vall de Pop.

En total, la merma de producción respecto a una campaña normal oscilará en torno al 85 % en el conjunto de la zona productora, una cifra alarmante y muy elevada que los agricultores de secano de la provincia de Alicante no pueden soportar, si a la postre sumamos las pérdidas de otros cultivos muy golpeados como el cereal o la cereza.

Piden ayuda económica

Ante la gravedad de la situación, Asaja Alicante reclama a la Conselleria de Agricultura, Ganadería y Pesca que actúe con contundencia a través de la puesta en marcha de ayudas directas a los agricultores afectados. "No podemos permitirnos que un cultivo tan valorado, con un arraigo histórico inmenso y ampliamente valorado en los mejores mercados se muera por la inacción de la Administración", manifiesta José Vicente Andreu, presidente de Asaja Alicante.

"Estamos ante unas pérdidas más que significativas que no se pueden pasar por alto". De ahí que detallen una serie de medidas para intentar paliar esta crisis. La primera de ellas es la prórroga de las ayudas excepcionales al sector agrícola previstas en el Real Decreto Ley 4/2023 en respuesta al agravamiento de las condiciones del sector primario en los cultivos de secano: vid, cereales, cerezos y frutos secos.

"Es necesario que las Administraciones proporcionen una propuesta a la situación catastrófica al objeto de compensar mínimamente a los titulares de las explotaciones agrarias de las reseñadas tierras de secano", señalan a través de un comunicado.

A ello añaden que se establezcan bonificaciones a las cuotas de autónomo y a las cuotas de la Seguridad Social de los trabajadores contratados por cuenta ajena en 2024. A la Conselleria de Agricultura le piden a través de Instituto Valenciano de Finanzas una línea de financiación a medida para evitar el abandono de los cultivos de secano con unas condiciones ventajosas para los agricultores afectados.