El conseller Vicente Martínez Mus junto al alcalde de Orihuela, Pepe Vegara y el catedrático Joaquín Melgarejo.

El conseller Vicente Martínez Mus junto al alcalde de Orihuela, Pepe Vegara y el catedrático Joaquín Melgarejo. GVA

Economía

El agua desalada es ya el segundo aporte para la agricultura de Alicante, por encima del trasvase

8 octubre, 2024 06:25
Alicante

La hoja de ruta marcada por los gobiernos del PSOE que inauguró Cristina Narbona en 2004 al derogar el trasvase del Ebro, ya da sus frutos, veinte años después, cuando las políticas antitrasvasistas ya han logrado que los aportes de agua desalada para la Agricultura en el Levante español sean los segundos mayores de todas las alternativas posibles, por encima del Tajo-Segura.

Y es que así lo ha afirmado esta mañana en el transcurso del IV Congreso el Agua que se celebra en Orihuela el profesor Victoriano Martínez-Álvarez, de la Universidad Politécnica de Cartagena (UPCT) en su intervención El papel de los recursos hídricos no convencionales en el regadío.

En la investigación que ha desarrollado con sus colegas del UPCT (José F. Maestre-Valero, Belén Gallego Elvira y Alberto Imbernón-Mulero), Martínez ha destacado el uso de las aguas regeneradas y desaladas para el riego, explicando que pese a que en España el uso de aguas regeneradas en la agricultura apenas llega a la media mundial, en regiones como Murcia o la Comunidad Valenciana ya se reutiliza en el regadío hasta un 95%.

En el caso de la desalación, la media de uso para la agricultura en España es del 25% pero en estados dos regiones, con la construcción de las plantas desaladoras de Torrevieja, Águilas o Valdelentisco, se está llegando a los niveles más altos del mundo que encabeza Israel, utilizándose entre el 60 y el 80% del agua producida en la agricultura.

Estas situaciones, explicó el profesor, generan varios problemas como el del precio de la energía, sobre todo en la desalación (en la reutilización es similar al del trasvase), cuatro veces superior al bombeo de agua desde una cuenca a otra.

También, problemas de contaminación por fertilizantes y nutrientes (potasio, nitrógeno o fósforo) y de conductividad del agua (boro, cloro y sodio) que están obligando a los regantes a gastarse mucho dinero en análisis de agua para saber qué necesitan sus diferentes cultivos. Un gasto, sin embargo, que minimizó el experto en relación con la rentabilidad de los productos obtenidos.

Además, otra de las conferencias más interesantes de la jornada la protagonizó el catedrático de Economía y diputado nacional del PP, Joaquín Melgarejo, que habló de la "Agricultura regenerativa" como enfoque de la economía circular en el ámbito agrario.

Melgarejo, habló de la importancia de los suelos como factor decisivo en la agricultura junto con el agua y la energía. Y es que el suelo es un elemento de fácil degradación y difícil recuperación y que sin embargo "no es el que más atención atrae", explicó.

La Generalitat

El conseller de Medio Ambiente, Infraestructuras y Territorio, Vicente Martínez Mus, ha subrayado que en la provincia de Alicante "se ha cuantificado un volumen total reutilizado del 72,44 % del agua depurada, con registros de hasta el 100 % en algunas comarcas del interior".

Martínez Mus, en el transcurso del VI Congreso Nacional del Agua, ha subrayado la firme determinación del Gobierno valenciano en la gestión del agua, enfatizando que "cada gota cuenta, especialmente en el actual contexto de sequía".

En su intervención, el titular de Medio Ambiente ha subrayado el papel de la Comunitat Valenciana como "referente nacional en gestión hídrica, con un reciclaje del 40 % del agua de toda España", y ha reiterado el compromiso de la Generalitat de aumentar este porcentaje "hasta el 45% durante la presente legislatura”, con un enfoque especial “en la necesidad de optimizar la depuración".

Martínez Mus ha asegurado que la Generalitat "sigue trabajando en la mejora continua de las infraestructuras hídricas y en la implementación de tecnologías que optimicen el uso de recursos hídricos, reafirmando su papel como aliado clave para el desarrollo sostenible y la prosperidad de la región y para liderar la reutilización del agua en toda España".

Según los datos presentados por el conseller, durante el pasado año 508 instalaciones de saneamiento y depuración trataron un volumen de agua residual de 447 hectómetros cúbicos, de los cuales, el 56,26 % se destinó a fines productivos y medioambientes.

Asimismo, ha destacado la importancia de las 48 instalaciones de regeneración de agua (terciarios) y otras 50 donde se clora el agua para su uso agrícola e industrial.