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El poder adquisitivo de los habitantes de la Comunitat Valenciana cayó un 2,7 % entre el año 2008 y el 2022, el último año con datos del salario mediano publicado recientemente por el Instituto Nacional de Estadística (INE).

Según datos publicados en septiembre por el INE en su Encuesta de Estructura Salarial (EES), el salario mediano creció un 3,4% en España en 2022. Un dato que se queda más de dos puntos por debajo del crecimiento de los precios (5,7%), según la cuenta especializada Datadicto.

Mientras que en el total nacional la caída acumulada de poder adquisitivo desde 2008 es del 3,6 %, en la Comunitat Valenciana es casi un punto menor con una bajada del 2,7 % debido a que su salario mediano creció un 4,5 % desde el 2021.

Según el INE, el salario mediano en la Comunitat Valenciana en 2022 fue de 24.510 euros brutos. En el caso de los hombres fue de 26.683, subiendo un 3 %, y en el de las mujeres de 22.135, subiendo un 7,1 %.

Tan solo hay dos comunidades que han ganado poder adquisitivo en los 14 años que van desde el 2008 hasta el 2022. Estas son Baleares (+7,6%) y Canarias (+0,4%).

En la tercera posición se encuentra la Comunidad de Madrid, que, aun habiendo perdido, lo ha hecho en menor medida que el resto con un -1 %. Por otra parte, las peores paradas en estos años han sido Andalucía (-9,9 %), Castilla-La Mancha (-6,8 %) y Aragón(-6,2 %), según Datadicto.

El Gobierno actualizó a finales de septiembre sus previsiones macroeconómicas para los próximos años, con una senda de crecimiento según la cual el PIB crecerá por encima del 2 % este año y los dos siguientes.

Además, el Ejecutivo también incluye sus cálculos de inflación y salarios, según los cuales el poder adquisitivo de los españoles no se recuperará hasta el 2025 del 'golpe' inflacionista de 2022 causado por la Guerra de Ucrania.

Y es que si se toma en cuenta los años entre el 2019 y el 2024, el coste salarial —asimilable al sueldo bruto— ha crecido un 13,4 %, mientras que el precio de los alimentos lo ha hecho un 33,3 %. Es decir, que el coste de la cesta básica de la compra se dispara casi 20 puntos por encima de la revalorización salarial.