El presidente de la Cámara de Comercio de Alicante, Carlos Baño, ha celebrado la supresión del impuesto de sucesiones y donaciones en la Comunitat Valenciana que se ha aprobado hoy en las Cortes Valencianas y ha señalado que esta medida "favorecerá el emprendimiento, el desarrollo de la actividad económica y la atracción de inversiones en nuestra provincia".
El directivo ha asegurado que la decisión del Consell presidido por Carlos Mazón "es un paso significativo hacia un entorno más favorable para el desarrollo económico". Y ha añadido que generará "un marco fiscal atractivo y un escenario de seguridad jurídica y confianza para favorecer la fortaleza del tejido empresarial y, por tanto, la creación de empleo".
Se trata de una acción que era "esperada" y que se ha convertido, según Baño, en esperanzadora para el sector empresarial y la sociedad en general". "Favorecerá la continuidad de las empresas, especialmente las de menor tamaño y carácter familiar, lo que contribuye generar riqueza y empleo en nuestro entorno", ha expresado el presidente de la Cámara de Comercio.
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La eliminación de estas "barreras" y el ecosistema amable para la transmisión de empresas y patrimonio de una manera "más ágil y eficiente contribuirá a fortalecer nuestro tejido socioempresarial".
Asimismo, ha considera que las decisiones que está adoptado el Consell "para aliviar la carga fiscal, con la eliminación también de la Tasa Turística, la elaboración de unos presupuestos realistas y ajustados al escenario actual o la eliminación de trabas burocráticas, son mensajes muy positivos y muy valorados por los inversores nacionales e internacionales".
"La Comunidad Valenciana, y la provincia de Alicante, son territorios muy atractivos para invertir, pero sólo con palabras no basta y faltaba quizá ese espaldarazo con hechos tangibles y con pasos firmes como los que está dando el actual gobierno de la Generalitat Valenciana", ha sentenciado Carlos Baño.
Baño, contra los pactos del Gobierno
El presidente de la Cámara de Comercio de Alicante mostró su descontento por el pacto alcanzado entre el PSOE y Junts que permitió la investidura de Pedro Sánchez. Baño rechazó "la burla y el menosprecio para el resto de regiones de España" que supone la modificación del marco de financiación de Cataluña, recogiendo la cesión del 100% de los impuestos que se pagan en Cataluña.
El presidente argumentó que la decisión de plantear la creación de "un modelo de financiación ad hoc para Cataluña" es una falta de respeto a las demás zonas de España y hacia sus ciudadanos". Y aseguró que la situación se agrava si se habla de la Cominitat Valenciana y Alicante, territorios "castigados por un modelo de financiación que nos perjudica y maltratada en cuanto a las inversiones del Estado".